Guzmán junto al fallecido Eduardo Thompson en el sketch por el que más se los recuerda: ''Pinto, Paredes y Angulo''.
El MercurioSANTIAGO.- El humorista chileno Gilberto Guzmán, conocido por su participación en espacios como "Pinto, Paredes y Angulo" y personajes como el "Fatiga", se encuentra internado en estado grave en el Hospital Barros Luco, a causa de un infarto que sufrió el sábado.
Guzmán, quien alcanzó su momento de mayor popularidad en el "Sábados Gigantes" de los 80, podría ser operado en las próximas horas, en una intervención de alta complejidad que requeriría de su traslado al Hospital Salvador.
Según cuenta Tatiana Merino, amiga de Guzmán y con quien compartió varias veces escenario, el humorista "está medio complicado, porque al parecer le estaba entrando sangre a los pulmones, y lo tienen que operar de la aorta. La operación es muy riesgosa. Según los médicos, están intentando tratar el problema sin tener que operar. Ahí están viendo, de un momento a otro pueden decidir operarlo y trasladarlo al Hospital Salvador".
La actriz y vedette no ha podido ver a Guzmán, pero se ha mantenido en contacto con el hijo de éste, quien le confirmó que "está sedado y pasó muy mala noche".
La ex compañera de Guzmán en las rutinas de "Sábados Gigantes" cuenta que, por el momento, se necesitan dadores de sangre para la eventual operación del humorista, por lo que quienes puedan ayudar deben ir hasta el banco de sangre del Hospital Salvador.
Gilberto Guzmán es unos de los rostros más característicos de una generación de humoristas en retirada —y de la que ya han partido nombres como Jorge Franco y Chicho Azúa—, criada en las revistas y que logró amplia popularidad en la televisión de los años 80.
"Pinto, Paredes y Angulo" es el más recordado de los espacios que realizó junto a Eduardo Thompson y Guillermo Bruce, con quienes formó un trío regular y sólido en el humor local. De ellos, el primero falleció en 2007 y el segundo se encuentra en una delicada condición, a causa de un accidente vascular que sufrió en 2005, al que siguieron una infección renal y un diagnóstico de cáncer.