Esposa de Sandro agradece a los médicos, al gobierno y hasta a las "nenas"

BUENOS AIRES.- La esposa del popular cantautor argentino Sandro, Olga Garaventa, agradeció hoy a los médicos, al Gobierno y a los "fans" por la atención y el apoyo que recibió su marido, fallecido la semana pasada a los 64 años tras una extensa enfermedad.

"En éste, tal vez el momento más doloroso que he debido enfrentar a lo largo de mi vida, no quiero dejar de hacer llegar mi agradecimiento a todos aquellos que, movidos por el respeto y el amor que generaba mi esposo, no dudaron en prestarme su total apoyo", señala Garaventa en una carta difundida este lunes entre los medios.

La mujer de Roberto Sánchez, el verdadero nombre de Sandro, agradeció al equipo médico que atendió al intérprete mientras estuvo internado en el Hospital Italiano de la provincia de Mendoza, donde el pasado 20 de noviembre fue sometido a un trasplante coronario y pulmonar.

También dio las gracias a los comandantes de Gendarmería (policía de frontera) que intervinieron en el traslado de Sandro en un avión sanitario desde Buenos Aires a Mendoza, para que el cantante fuera trasplantado.

"Siempre los llevaré en mi corazón", sostiene Garaventa en la misiva, en la que también reconoce "la preocupación y la ayuda que en absoluta privacidad" brindaron la presidenta, Cristina Fernández, y el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.

"(Fernández) todos los días llamaba personalmente para interesarse por la salud de mi esposo y que resolvió no pocos problemas operativos", añadió la mujer, casada con el cantautor desde 2007.

También recordó a las "nenas" de Sandro, tal como el músico llamaba a sus seguidoras, que "con tanto respeto y devoción" acompañaron al artista "sin desmayar" en Mendoza, "y a todos los que ya en Buenos Aires ofrecieron su silencioso homenaje tanto en el Congreso como en el largo camino hacia el cementerio".

"Les hago llegar mi reconocimiento porque seguramente desde donde esté Roberto estará feliz de haberlos tenido consigo. Fue un homenaje único verdaderamente nacido del amor que él cosechó y mereció recibir", expresó.

Sandro murió el pasado lunes en el hospital de Mendoza, 45 días después de haber sido trasplantado para revertir una extensa enfermedad pulmonar provocada por su adicción al tabaco. A su velorio asistieron 45 mil personas, y otras decenas de miles lo despidieron en las calles.