''Glory of love'' fue una de las canciones más mundiales que alguna vez cantó Peter Cetera.
Andrea RoblesHace más de treinta años se acostumbró a una mina de oro -las baladas rock-, cuando el formato era sinónimo de pop en las listas estadounidenses. Aunque Peter Cetera era la voz de una banda como Chicago, con un laborioso nombre en el jazz-rock, el batatazo que dieron en 1976 con "If you leave now" le demostró al conjunto -y sobre todo al vocalista y bajista-, que bien valía torcer las raíces si la cosecha era conquistar el número uno.
En Santiago, con un look entre Bill Clinton y el fallecido Robert Palmer -traje negro impecable, cabellera trabajada por peluquero-, Peter Cetera no lucía precisamente relajado, pero supo traspasar la barrera del empaquetamiento que su figura irradia.
Cetera estuvo locuaz: habló del partido de Chile y España pronosticando un dos a uno a nuestro favor; ironizó con lo ocupado que habría estado Kenny Rogers para no grabar el exitazo "You're the inspiration", escrita en un principio para él, y recordó cuando en los 70 llenaba estadios y la gente prendía sus encendedores al ritmo de sus melosas baladas.
A los 65 años su voz está entera, pero ha bajado convenientemente el tono. Aún así, fue más que consistente con clásicos como "Glory of love" y "The next time I fall", más las versiones de "S.O.S." de Abba y "Lady Madonna" de The Beatles.
Nada queda en su propuesta de las aventuras que hicieron de Chicago una banda reconocida por sus bronces y ansias progresivas. Él sabe que su fama está en cantarle al amor y así envejece como artista, rendido en exclusiva a lo que le dio éxito comercial.