SANTIAGO.- Ya es una historia que se repite: Lo hicieron en 2006 con "Saltimbanco", en 2008 con "Alegría", y este año el Cirque du Soleil volvió a cautivar al público local de la mano de "Quidam", el espectáculo que los trae por tercera vez a Chile, y que tuvo su estreno oficial esta noche de martes, en la carpa ubicada en la elipse del Parque O'Higgins.
Eso sí, esta vez la compañía acudió a otros recursos para producir el mismo efecto. A diferencia de sus predecesoras, "Quidam" ofrece un conjunto mucho más pasivo, y a ratos lúgubre.
No hay aquí una atmósfera marcadamente mágica y onírica como la de "Alegría", y eso queda claro desde un inicio, cuando el payaso-anfitrión pone el tema central de ese espectáculo en una radio portátil, para luego hacer un gesto de asco que logra arrancar las primeras risas, pero que es también una clara manifestación de lo que está por venir.
Si antes sólo había luminosa fantasía, ahora también se esbozan conflictos en la siempre leve historia rectora, que rara vez es algo más que una excusa para el despliegue artístico y acrobático.
En esta ocasión el hilo conductor se ubica en una niña (Zoé) desestimada por sus padres, que escapa de su realidad refugiándose en un mundo fantástico, que si bien tiene altas dosis de magia, también reporta momentos de angustia para la protagonista.
No todos los seres en escena sonríen, y la quietud y los ritmos pausados, tomando los tiempos necesarios para cada movimiento, son también un recurso válido en "Quidam". Por lo mismo, los números de alta destreza física se suceden en menos cantidad que en anteriores oportunidades, pero resultan igualmente sorprendentes.
Esos giros y apuestas de este espectáculo parecieron ser cabalmente comprendidos por el público presente en el estreno, una audiencia compuesta sólo por invitados, entre los que se encontraba el Presidente Sebastián Piñera y algunos de sus ministros, además de un amplio contingente de rostros de televisión.
Felipe Camiroaga, Claudia Burr, Katyna Huberman, Berta Lasala, Mónica Rincón, Jordi Castell, José Miguel Viñuela, Diego Muñoz, Diana Bolocco, María José Prieto y Carlos Pinto, son apenas una pequeña muestra.
Todos ellos, al igual que el resto de la audiencia, aplaudieron cada cuadro de "Qudam", y cerraron con una prolongada ovación para la compañía, que de este modo dio el vamos oficial a su tercera estadía en Chile, donde más de 70 mil personas ya se han asegurado un asiento para verlos durante las próximas cuatro semanas.