Cuatro hombres arriba, ochenta por ciento de mujeres al frente: Backstreet Boys en Arena Santiago, jueves 3 de marzo de 2010.
Foto: Gonzalo Muñoz Farías.
De todas las boy bands que existieron en la década pasada, Backstreet Boys fueron los más exitosos. El jueves 3 de marzo el cuarteto de Orlando presentó su tour "This is us" y dio un show que probablemente sus fans recordarán por mucho tiempo.
La cita, realizada en el Movistar Arena, comenzó puntualmente a las nueve de la noche. No hubo preámbulos, los Backstreet Boys saltaron de inmediato al escenario, desatando las pasiones de un público estimado en quince mil personas según la organización y compuesto en un ochenta por ciento por mujeres.
Los "Boys" se despacharon de entrada "Everybody", seguida de "We've got it goin' on", dando indicios de que repasarían todos y cada uno de sus éxitos, y eso fue lo que ocurrió: "Quit playing games (With my heart)", "As long as you love me", "Show me the meaning of being lonely", "The call" y "Larger than life" fueron sólo algunos de los temas que dominaron un gigantesco setlist de 24 canciones.
El grupo presentó un show simple, no abusó de la parafernalia y solamente tuvo a la banda y a un DJ / baterista sobre el escenario. A los artistas, ya todos sobre los treinta años, se les notó el oficio. Se mostraron cercanos al público en todo momento, no dejaron nunca de saludar y mostrarse contentos en su show.
Durante su espectáculo, los Backstreet Boys revivieron completamente el espíritu de las boy bands de la década pasada. Las coreografías, aparte de unas pocas descoordinaciones, fueron ejecutadas a la perfección. No hubo playback y la calidad vocal de los integrantes salió a relucir, dejando en claro que Nick Carter y Brian Litrell son los más talentosos, pero tampoco hay que desmerecer a A. J. McLean ni a Howie Dorough, a quien solo se le puede criticar que es un poco tieso a la hora de bailar.
Al show le faltaron quince minutos para completar las dos horas y en él se mezclaron clásicos y algunos temas de los últimos discos como "PDA", "Incomplete" y "This is us". Las fanáticas de la boy band más vendedora de todos los tiempos pudieron irse más que contentas para su casa, habiendo disfrutado de un largo show que gratamente sonó y se vio mucho mejor de lo que la mayoría esperaba.
