El grupo de Neil Tennant se entusiasmó con la música para obras, y ya propuso a De Frutos musicalizar otro montaje.
LUNLONDRES.- Aunque todavía está dolido por el escándalo de su última producción londinense, que lo dejó prácticamente un año sin trabajo, el español Javier de Frutos se dio a la tarea de coreografiar un cuento de Hans Christian Andersen, que complementó nada menos que con música de los Pet Shop Boys.
En el teatro Sadler's Wells, el español dice estar "sorprendido por la violencia" del público que asistió a su anterior creación en la capital británica, un homenaje a Diaghilev en forma de sátira titulado "Condena Eterna de Sancho y Sánchez". Su molestia se dirige principalmente al hecho de que el malestar se expresara contra los bailarines.
"No lo entiendo, sobre todo en un país con una tradición literaria de sangre y violencia, con autores que van de William Shakespeare o Christophe Marlowe hasta Sarah Kane", señala el coreógrafo de 48 años, que no ha superado el hecho de que también la BBC boicoteara la obra.
"Aquélla era una obra muy barroca en el espíritu de Diaghilev, que en unión de Jean Cocteau se dedicó en su día a tocarle las pelotas al público, en busca siempre de titulares. Respondía a un trabajo serio de investigación", dice De Frutos, quien reconoce que el personaje de "Condena Eterna..." que suscitó mayor polémica, el del Papa escocés, era totalmente inventado.
Con su nueva coreografía, basada en una fábula del famoso cuentista danés titulada "Lo más increíble", De Frutos quiere quitarse ahora la espina o, como él mismo explica, "hacer expiación" por aquello.
La idea de coreografiar a Andersen no fue suya, sino del propio dúo británico Pet Shop Boys y del bailarín ucraniano Ivan Putrov, antigua estrella de la Royal Opera House.
En sólo tres páginas, Andersen cuenta la historia de un rey que ofrece la mitad de su reino y la mano de su hija a quien invente "la cosa más increíble". El concurso parece haberlo ganado un hombre que inventa un reloj maravilloso, en el que con cada campanada aparece una nueva figura como Moisés, Adán y Eva.
Pero sale luego un competidor celoso, interpretado por Putrov, que hace algo más increíble que la creación del reloj: Lo destruye, y entonces gana la apuesta. Pero en el momento de boda, el reloj se recompone como por arte de magia y todos se muestran de acuerdo en que esto es algo aun más inverosímil, con lo que el creador del original puede por fin casarse con la princesa.
De Frutos y los Pet Shop Boys han tenido como colaboradores en este proyecto a la galardonada diseñadora escénica Katrina Lindsey y al también premiado creador de cine de animación Tal Noster, además de 16 bailarines y una orquesta de 26 miembros.
El coreógrafo se declara encantado de haber podido trabajar desde el comienzo con músicos vivos, dos personas que llevan ya "treinta años en el oficio" y que se caracterizan por "una gran curiosidad intelectual", dice respecto del famoso dúo de electropop.
Ésta es la primera vez que los Pet Shop Boys componen música para un ballet, aunque antes crearon la partitura para el filme "El acorazado Potemkin".
Y todo apunta a que la adaptación de "Lo más increíble" tampoco será la última colaboración entre el coreógrafo español y el dúo británico, ya que De Frutos cuenta que hace unos días lo llamó desde Alemania uno de los Pet Shop Boys, para hablarle de la posibilidad de hacer "El Traje Nuevo del Emperador", también de Andersen.