La banda abrirá el Coca-Cola stage el primer día del festival.
El MercurioSANTIAGO.- Lollapalooza es una vitrina prácticamente incomparable con otros certámenes musicales de este tipo que se han realizado en el país, una visión que comparten Los Bunkers, uno de los invitados nacionales, que a través de su bajista Gonzalo López narra cómo cuentan las horas para su presentación.
López cree que Lollapalooza es una gran posibilidad para que la gente "tenga
la oportunidad de ver grandes bandas" y agrega que será "un precedente para los años posteriores", ya que es de la idea de que esta iniciativa se transforme en una tradición.
Para el músico, este espectáculo debe mantener el "alto nivel" demostrado por las productoras nacionales en el último tiempo y no cree que haya algo que envidiarle a las puestas en escena extranjeras, puesto que "los festivales que se han realizado en Chile han tenido una calidad técnica súper buena".
Para él, un punto importante es que las bandas nacionales tendrán un roce importante con artistas de nivel internacional y además podrán aprender y conocer "otro tipo de organización", especializada en montar grandes espectáculos.
Para Los Bunkers la oportunidad es doble, ya que luego de este festival, les toca viajar para estar presentes el domingo 17 de abril en el último de los tres días de Coachella, uno de los eventos más reconocidos a nivel mundial.
Pero antes, en "Lolla", la banda tiene la responsabilidad de abrir el primer día del Coca-Cola stage y López dice que la banda encuentra "la raja" la invitación. Abrir un escenario en una instancia tan grande puede ser una presión para algunos, pero para él "es un buen horario, porque técnicamente somos los últimos en probar sonido y los primeros en tocar".
El músico cree que estar presentes en el festival es "una buena oportunidad" para su banda y asegura que agradecen la invitación, la que considera "es una respuesta al trabajo que hemos realizado y al último disco".
El show que Los Bunkers presentarán en Lollapalooza será un recorrido por sus grandes éxitos, pero centrado en su última placa Música Libre, un tributo a Silvio Rodríguez.