Director italiano estrena película sobre un Papa que padece crisis de pánico

ROMA.- El pánico que invade a un Papa tras su elección al trono de Pedro inspira el nuevo filme del italiano Nanni Moretti, "Habemus Papam", una comedia psicoanalítica entre los fastuosos corredores y palacios del Vaticano.

La película, que comienza con las cinamatográficas imágenes reales de los funerales del Papa Juan Pablo II en la plaza de San Pedro en abril del 2005, describe con respeto, gracia y delicadeza un cónclave y la dramática crisis interior que genera en el nuevo pontífice francés su elección.

El director, actor, productor y guionista cinematográfico italiano, de 57 años, conocido por la refinada ironía y el sarcasmo con el que aborda las angustias de su generación, confesó que quiso realizar ante todo "una comedia".

"Me interesaba narrar un personaje frágil, que se siente inadecuado frente a ese poder que le otorgan. Contar ese personaje dentro de la comedia", aseguró el realizador tras la proyección a la prensa.

Seleccionada este jueves para participar en el festival de Cannes, la nueva cinta de Moretti, autor de "Palombella Rossa" (1989), "Aprile" (1998) y "La habitación del hijo" (2001), que obtuvo la Palma de Oro en el festival francés, tampoco ahorra flechazos contra uno de sus temas favoritos, el psicoanálisis.

El terror, la crisis de pánico, el miedo para asumir un cargo tan importante paralizan al nuevo Papa, interpretado por el actor francés Michel Piccoli, de 85 años, justamente en el momento en el que el cardenal camerlengo anuncia a la muchedumbre desde el balcón de la basílica de San Pedro el clásico "Habemus Papam".

"Ayúdenme, no aguanto, no aguanto", corre espantado entre los pasillos del palacio apostólico el nuevo Papa, tras su primera sesión de psicoanálisis ante todos los cardenales.

El nuevo elegido termina por huir del Vaticano, pasear en bus, ir a teatro, al restaurante, como dicen solía hacer de incógnito el fallecido Juan Pablo II al inicio de su pontificado.

"Si algunas personas ven referencias a Juan Pablo II no se equivocan. Quise de todos modos evitar hablar de los escándalos recientes de la Iglesia. Cuando escribimos el filme y lo rodamos no me dejé involucrar por ello. El filme era otra cosa", recalcó Moretti.