Javiera & Los Imposibles se reencuentran con su público y con todos sus sonidos

SANTIAGO.- Los de siempre, con las canciones de siempre. Eso es lo que promete Javiera Parra para esta noche, cuando junto a su banda Los Imposibles se suba al escenario del Centro Cultural Amanda, en el que será uno de sus principales shows en lo que va de temporada.

La cantante está entusiasmada y ansiosa. "Lo más entretenido para nosotros es que estamos los de siempre, (Cristián) López, Cuti (Aste), yo... Los del primer disco, pero también está participando DJ Caso, que estuvo en toda la etapa de AM, que le dio otro sonido a la banda, y que hace muchísimo tiempo que no tocamos con él", dice Javiera revelando de qué forma las raíces de la agrupación aflorarán esta noche.

"La presencia de Caso lo tira siempre para un lado más electrónico, además que cuando tocamos con él incluimos temas de El poder del mar que no siempre tocamos, porque no tenemos la infra sonora que él nos da", dice sobre el DJ. Así, "vamos a tocar también canciones de AM que hace tiempo no tocamos, porque nos aburrimos de tocarlas, pero además porque no teníamos el formato para hacerlo, como 'Procuro olvidarte' o 'Vivir así es morir de amor'. Vamos a revisitarlas, pero con mucho más desparpajo, más rockeras, más electrónicas. Muy desprejuiciados", cuenta.

Pero además habrá nuevos invitados: Adanowsky se subirá al escenario para interpretar "Así", el tema que el grupo puso en el disco tributo a Sandro, una figura con la que el hijo de Alejandro Jodorowsky cultiva notorias similitudes, antes y deespués de su alterego El Ídolo. "¡Claaaaro, por eso lo invitamos!", reafirma Parra.

Muy poco en cambio se verá del trabajo en que en estos momentos está involucrada la artista: Nada menos que un tributo a su abuela, la legendaria Violeta Parra, titulado Árbol de la vida.

Pese a estar en plena elaboración, la magnitud del proyecto y el atrevimiento que implica ya han dado que hablar. Sin embargo, la cantante aclara que "no tengo ganas de mostrarlo hasta que esté listo", aunque sí se permite algunos adelantos: "El trabajo está súper bonito. Nos hemos demorado harto, pero a conciencia. Podríamos haberlo sacado para los 90 años de la Violeta o para el Bicentenario, y vamos cobrando en ese carro. Pero nunca ha sido ésa la intención. Es más bien un proyecto bien personal, que tampoco tiene pretensiones de ser el gran disco de Javiera Parra, sino mi humilde acercamiento a la obra de la Violeta, y ojalá que yo, con el espacio que tengo en la música, pueda hacer que la gente de otras generaciones escuche sus letras, y que ojalá vuelva a sonar en la radio".

Sobre qué lecturas está dando a las creaciones de la insigne cantautora, cuenta que "hay canciones que están saliendo muy sencillas: piano y voz, guitarra y voz. No es para nada un disco de versiones rockeras. Son canciones hechas con mucha profundidad, sensibilidad, algunas con un sonido más easy listening, otras bastante desprovistas, pero también hay cosas más electrónicas. No hay un respeto sacro, en el que no puedo hacer nada porque es mi abuela. Si no, no lo haría".