Julio Bocca pasó del escenario a las oficinas, como director del Ballet Nacional de Uruguay.
EFEMADRID.- El bailarín Julio Bocca asumió hace un año la dirección del alicaído Ballet Nacional de Uruguay, el más antiguo de Hispanoamérica junto al Colón argentino, y ya ha comenzado a revertir su prolongado declive, tras firmar su primera gira europea.
El bailarín, que decidió colgar las zapatillas a fines de 2007, presentó en Madrid el programa que la compañía estrenará el 9 se julio en Segovia, para seguir el domingo en el Teatro Auditorio de San Lorenzo de El Escorial, y el lunes en el Teatro Conde Duque de Madrid, en los Veranos de la Villa.
"He estado ya muchas veces en El Escorial y en el Conde Duque, donde he tenido mis 'histerias' para que la platea pudiera ver mejor, pero parece que lo he conseguido", bromeó el artista.
Bocca asegura que para él es "un honor" y "un desafío" dirigir un ballet como el Sodre, con 75 años de vida, y que ha encontrado en Uruguay "todo el apoyo".
El retirado intérprete logró fusionar el sistema público y el privado, lo que le permitió aumentar la jornada laboral de los bailarines de cinco a siete horas.
"Trabajamos muy bien. Estoy feliz y con muchos proyectos. Quiero que el Sodre recupere la posición de privilegio que tenía e ir mucho más allá", subrayó Bocca.
Los bailarines del Sodre llevan a Europa un programa que incluye "Nuestros valses", "Doble corchea" y "Percusiones", de Vicente Nebrada, y "Tango/ Candombe", de Ana María Stekelman, unas obras "muy lindas, agradables de ver y oír", según su director.
La gira por España continuará en Pontevedra, La Coruña, Málaga, Vigo, Santiago de Compostela y concluirá el 30 de julio en Huelva, desde donde viajarán a Italia para actuar, el 19 y el 21 de julio, en Verona y Nápoles.