Jay Carney descartó de plano la supuesta filtración de datos a la realizadora Kathryn Bigelow.
Reuters
WASHINGTON.- La Casa Blanca calificó hoy de "falsos y ridículos" los rumores de que dio acceso a información clasificada sobre la muerte de Osama bin Laden a la cineasta Kathryn Bigelow, que está filmando una película sobre los hechos, después de que un congresista pidiera una investigación oficial sobre las alegaciones.
"Las acusaciones son ridículas (...) es simplemente falso", sostuvo el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney.
El legislador Peter King, presidente del Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes, había anunciado hoy que escribió una carta al inspector general del Pentágono, Gordon Heddell, y a su par de la CIA, David Buckley, reclamándoles información al respecto, así como una evaluación sobre las posibles consecuencias en materia de "comprometer" fuentes de inteligencia y seguridad en caso de que efectivamente se diera acceso a material altamente secreto.
El origen de la demanda está en una columna del diario "The New York Times" del pasado fin de semana en la que se afirma que tanto Sony Pictures, productora del filme, como Bigelow, quien recibió un Oscar por su película "Vivir al límite" ("The Hurt Locker"), "están recibiendo acceso de alto nivel a la misión más clasificada de la historia de parte de una administración que ha tratado de meter a más gente en la cárcel por filtrar información clasificada que el gobierno Bush".
"No discutimos información clasificada", subrayó Carney al rechazar los reportes. Según especificó, la información proporcionada sobre la misión a la directora "se centró en el papel del presidente" y es la misma que ha proporcionado a periodistas y otros que están trabajando en libros o documentales sobre la operación que aniquiló al líder de Al Qaida con el objetivo de asegurarse de que "los datos son correctos".
King recordó en su misiva que los más altos responsables de Defensa estadounidenses ya criticaron poco después de la muerte del líder de Al Qaida en una operación secreta ordenada por Obama a comienzos de mayo que se estaba filtrando demasiada información sobre el operativo.
"Filtraciones de información clasificada respecto al ataque a Bin Laden ya han provocado (...) el arresto de paquistaníes que las autoridades locales creen que ayudaron a la CIA en la operación del 1 de mayo", subrayó King.
"Una participación de la Agencia en la realización de una película sobre el operativo podría incrementar este tipo de filtraciones y minar la duramente ganada reputación de la organización de tener 'profesionales discretos', una reputación importante para que sigan teniendo éxito en sus operaciones", alertó.
"Y el éxito de esas organizaciones es vital para nuestra seguridad nacional", subrayó y criticó que, de ser cierto que la realizadora ha tenido acceso a la información clasificada, esto demostraría que el gobierno de Obama "favorece una visión cinematográfica de la historia en vez de la transparencia".
En una crítica a la acción de King, el portavoz de la Casa Blanca dijo que "ante la continuada amenaza del terrorismo, el Comité de Seguridad Nacional debería tener cosas más importantes que discutir que una película".
La cinta de Bigelow, que todavía no tiene título, está prevista que llegue a los cines en octubre del año próximo, justo un mes antes de las elecciones presidenciales en las que Obama aspira a ser reelegido.
La película había arrancado su producción antes de la muerte de Bin Laden. Ésta provocó que el desenlace de la cinta tuviera que ser modificado. Sony Pictures se hizo con los derechos del film pocas semanas después de que Obama anunciara en una dramática comparecencia nocturna la muerte del líder terrorista más buscado de la década, apenas unos meses antes de la celebración del décimo aniversario de los atentados del 11 de septiembre de 2001 cuyo cerebro fue el mismo Bin Laden.