Batman es el segundo héroe que llega este año a los grandes teatros del mundo, tras el accidentado arribo del Hombre Araña a Broadway.
APLONDRES.- Además de su lucha en las páginas de cómic, Batman también ha combatido el mal en innumerables versiones televisivas, cinematográficas e informáticas. Sin embargo, hasta ahora nunca había actuado en un show en directo.
Pero 2011 quedará como el año en que se pudo ver al hombre murciélago por primera vez en vivo y en directo, en el montaje "Batman Live", espectáculo que se estrenó recientemente en la O2 Arena de Londres.
Las primeras fechas de la obra, que costó varios millones de euros, fueron acogidas positivamente por la crítica, y también parecen haber contentado al público, en el que se ven varios niños disfrazados de su héroe favorito, mientras que en la pausa no son pocos los que intentan emular las escenas que más los cautivaron.
Los cuadros de acrobacia son los que más aplausos arrancan. Los críticos incluso han llegado a comparar el show con el "Cirque du Soleil" por esa razón. A las acrobacias se unen los efectos de luz y sonido, pirotécnicos y musica les.
Sin embargo, el show de Batman no llega a ser un musica l, como reiteran e insisten los organizadores, debido a un detalle fundamental: Aunque hay música, aquí no se canta.
En "Batman Live", el autor Allan Heinberg ha recopilado y puesto en escena episodios de la historia original de cómic, que arrancó a finales de los años 30. Así, el show muestra cómo el millonario Bruce Wayne se convierte en Batman después de que sus padres son asesinados por un ladrón.
Con Robin, que también de joven pierde a sus padres, el hombre murciélago recibe apoyo en su lucha contra el crimen en Ciudad Gótica. Y junto a ellos no podían faltar otras legendarias figuras del cómic: el Guasón, Gatúbela, el Pingüino o el temible Espantapájaros, son algunos de los villanos que aparecen.
Uno de los highlights de la noche es la pantalla de video gigante situada en el fondo del escenario, que a modo de un cómic real va pasando páginas y situando a los héroes en diversos escenarios. Y la conexión entre la escena y el cómic se logra con encendidos colores y originales efectos.
Mientras, los espectadores celebran momentos de culto, como la espectacular presentación del Batimóvil o los arrumacos entre Batman y Gatúbela, que al final de la obra forman parte de una suma que logra dejar satisfechos a grandes y a chicos.