Las joyas más importantes para Taylor eran las que le regalaron dos de sus esposos, Mike Todd y Richard Burton.
APNUEVA YORK.- La colección de joyas de Elizabeth Taylor, que será subasta en diciembre próximo, ya puede ser vista en la casa de ventas Christie´s, en Nueva York.
La fallecida estrella de Hollywood reunió una de las colecciones de joyas más destacadas del mundo, que incluye un anillo de diamante de 33,19 quilates y una perla con forma de pera del siglo XVI que recibió de uno de sus siete maridos, Richard Burton, con quien se casó en dos ocasiones.
El experto en joyas de la rematadora, Rahul Kadakia afirma que "estas son las joyas más importantes que Elizabeth Taylor recibió de los grandes amores de su vida, Mike Todd y Richard Burton. Corresponden a momentos de su vida muy preciados para ella", afirmó.
Las historias detrás de cada pieza son tan invalorables como las mismas gemas. En sus memorias del 2002, " Mi romance con las joyas", Taylor lleva a los lectores en un viaje personal por la colección, describiendo en sus propias palabras cómo llegó a poseer cada prenda.
"Jamás pensé en mis joyas como trofeos", escribió. "Estoy aquí para cuidarlas y quererlas. Cuando muera y sean subastadas, espero que quien las compre les dé un verdadero hogar".
Se trata de una colección extraordinaria de rubíes, diamantes, esmeraldas y zafiros con diseños complicados y audaces.
Destaca La Peregrina del siglo XVI, una de las perlas con forma de pera más grandes y simétricas en el mundo, que Burton adquirió para Taylor en 1969 como regalo del Día de San Valentín.
La pareja se conoció en Italia en el plató del filme de 1963 "Cleopatra", y se casó por primera vez en 1964.
Otrora parte de las joyas de la corona de España, la perla pasó sucesivamente a manos de José Bonaparte, Napoleón III y el duque de Abercorn.
Al llegar a una subasta en Nueva York, Burton la adquirió por 37.000 dólares, superando la postura de un miembro de la familia real española.
Cartier luego creó un collar de rubíes y diamantes del que colgaba la perla, en un diseño inspirado en las joyas que lucían las reinas Margarita e Isabel de España en los famosos retratos de Velázquez.
Christie's espera venderlo por entre 2 y 3 millones de dólares.