Con piezas como ''El nacimiento de Venus'', Botticelli llegó a las enciclopedias de la historia del arte cinco siglos más tarde.
Archivo de El Mercurio
ROMA.- El magnífico y original trazo de Sandro Botticelli (1444-1510) y de su talentoso alumno Filippino Lippi (1457-1504), deslumbran en Roma gracias a una exposición dedicada a uno de los artistas predilectos de Lorenzo de Médici, el Magnífico, el gran mecenas del Renacimiento italiano.
El alumno de Botticelli, nacido en Prato (Toscana), que trabajó conjuntamente con Perugino, Ghirlandaio, fue evolucionando hasta lograr un diálogo artístico de igual a igual con su padre, el célebre Fra Filippo y con su amigo y rival, Botticelli, gracias a sus visiones excéntricas y exóticas.
La exposición, montada en las elegantes salas de la "Scuderia del Quirinale", presenta retratos, retablos, dibujos y pinturas y sobre todo permite descubrir las diferencias y semejanzas entre obras maestras de gigantes de la pintura del siglo XV.
Inaugurada por el presidente de la República italiana, Giorgio Napolitano, la exposición, que costó cerca de 1,7 millones de euros, con la curaduría de Alessandro Cecchi, director de la Galería Palatina, rinde homenaje hasta el 15 de enero a la obra del llamado "Filippino", ensombrecida por siglos por los grandes maestros que lo precedieron.
"Estaba al mismo nivel de Botticelli y tenía inclusive más imaginación que su maestro. Era un artista moderno además", sostiene Cecchi.
Resalta por la fuerza de los colores la obra realizada para la iglesia de San Miguel de Lucca, con un hermoso San Sebastián, así como el óleo "Pala o retablo Nerli", restaurado para la ocasión y la Virgen con el niño Jesús, que juega irreverentemente con la cruz de San Juan Bautista.
El recorrido artístico del hijo de Fra Filippo con la novicia Lucrezia Buti, lo que generó escándalo en su época, es ilustrado en forma cronológica con obras provenientes de museos y colecciones privadas, raramente prestadas.
En total, unas cuarenta pinturas de Lippi y siete de Botticelli, permiten descubrir una de las pinturas más fascinantes del gran movimiento cultural que se produjo en Europa Occidental en el siglo XV.