Yelle vuelve a Chile con una promesa: "Sólo quiero hacerlos felices"

SANTIAGO.- En los archivos de la ya extinta discoteca Kubix quedó escrito que uno de los shows más encendidos y energéticos que vieron sus luminosos cubos rojos, tuvo lugar el 27 de septiembre de 2008.

Ese día, la francesa Yelle se animó a llegar hasta el último país de Sudamérica con apenas un disco editado (Pop-up), pero con un registro que ya la tenía figurando como uno de los fenómenos europeos de MySpace y hasta como inesperada musa del tecktonik.

"Fue un muy buen show. La gente fue muy amable, bailaron, se divirtieron, y recuerdo que después del show tuvimos la oportunidad de ir a la montaña, en el medio de Santiago, para hacer un asado con todo el equipo. Fue muy bonito ver la ciudad. Fue un momento muy cool con toda la gente que viajó conmigo", recuerda hoy la cantante, cuyo verdadero nombre es Julie Budet.

La imagen de Yelle desenfadada, sus aires de diva indie y su celebrado repertorio de borde electroclash, fueron la marca que se llevaron los asistentes de aquella ocasión, y es ese mismo perfil el que ahora refuerza en Safari Disco Club, el disco que lanzó este año y que mostrará en vivo el sábado en La Cúpula del Parque O'Higgins.

"Espero que a la gente le encanten las nuevas canciones y el nuevo show, y espero que se diviertan y bailen. Sólo quiero hacerlos felices", dice.

Para eso, se permitió retocar hasta los temas que editó hace apenas unos meses, con la misión de que sus presentaciones combinen tanto el concierto como la fiesta. "Nos gusta hacer diferentes versiones de las canciones, tratamos de transformarlas un poco para el show. La gente puede bailar con ellas, no es sólo la canción como en el álbum. Tratamos de mezclarlas, añadir baterías, sintetizadores y dar con una versión distinta. Damos otra mirada a la música. A mí me gusta bailar mucho en el escenario, y hacer que la gente baile y se divierta. Hay una real conexión entre nosotros", adelanta.

Sobre el nuevo disco, cuenta que "nos tomó un año impulsarlo, pero estamos muy orgullosos, porque es una buena evolución, crecimos. Probablemente estamos hablando de cosas diferentes, aunque aún hablamos de las relaciones entre chicos y chicas".

Y aunque no cree que los tiempos que ahora maneja le permitan hacer otro asado o salir a recorrer Santiago, sí espera llevarse algo de música chilena, y hasta adelanta una sorpresa: "Tienen que mostrarme algunas nuevas bandas chilenas cool. La última vez que estuvimos en Chile tuvimos la oportunidad de descubrir a Los Prisioneros. Ahora soy una nueva fan de esa banda, y ya estamos hablando de hacer un cover de una de sus canciones. Tal vez el próximo año lo haremos. Y si tienen un nuevo grupo que mostrarme, seré muy feliz".