Bowie junto a Iman, su esposa y eje de su actual estilo de vida.
EFELONDRES.- A David Bowie le ha dado por la flauta dulce. Al menos declara su amor por el instrumento en un mensaje navideño en el que dice que ha compuesto "Requiem por un gnomo sonriente", de cuatro horas, y comienza a tocar la flauta. Desde el público le piden por favor que pare.
En realidad, se trata de un video para una ONG británica, pero la estrella del pop sí ha cambiado. De ninguna manera quiere actuar como lo hacía hace 30 años. Ahora, cuando celebra los 65 años que hoy cumple, se concentra sobre todo en su familia.
"En algún momento se llega a un punto en el que uno se da cuenta de que quizás hay tres o cuatro cosas importantes", dijo ya hace unos años en una entrevista. Fue poco después de que naciera su hija, la primera con su segunda mujer, la modelo somalí Iman. "Cuanto más mayor te haces, menos preguntas te preocupan. Por desgracia, hay algunas que no tienen respuesta. La muerte es una de ellas".
En lo musical, su último trabajo, Reality, publicado en 2003, supuso un cambio respecto a Heathen (2002). "Al contrario que mi anterior disco Reality parece en realidad casi alegre. Heathen era (un disco) tranquilo pero la atmósfera tenía algo perturbador, algo desagradable", dijo entonces Bowie . "Reality tiene más los pies en la tierra, es más sosegado. También refleja aspectos negativos, pero he intentado mitigar los textos opresivos con melodías optimistas".
Perturbador, desagradable, raro, pero también absolutamente fascinante: Así se puede resumir gran parte del trabajo que llevó a la fama a este británico. En los 70 causó furor con su imagen andrógina. Parecía prever las tendencias, pero tal vez sencillamente seguía su propio estilo.
Su astronauta de ficción, Major Tom, y su álbum Space Oddity lo lanzaron a la fama mundial en 1969. Le seguirían trabajos de culto como The Rise and The Fall of Ziggy Stardust and the Spiders form Mars. En 1977 vio la luz Heroes, que escribió mientras vivía en Berlín, y en los 80 vieron la luz éxitos de masas como "Let's Dance". Además, Bowie intentó convertirse en un artista integral con incursiones en el mundo del cine y la pintura.
Su influencia pervive tres décadas después, en artistas como Lady Gaga, última de un continuo en el que figuran innegablemente nombres como como Morrissey, Duran Duran, Pulp, Suede, etc.
Bowie ha cultivado siempre los cambios continuos de personaje, característica que llevó a que uno de sus apodos más conocidos fuera "Camaleón". Pero como dijo una vez, todos sus perfiles algo en común: "Quizás un sentimiento de aislamiento. El aislamiento humano generalizado es uno de los grandes temas que se aprecian a través de toda mi obra".
Pero este artista multifacético hace mucho que ya no está sólo. Bowie , que ahora vive en Nueva Yok, cree que su principal papel ahora es el de padre. Además, a nivel musical ahora prioriza más los textos que las puestas en escena. El motivo, según confesó, es también su pequeña hija. "Sobre todo, subrayó, quiero ser un padre responsable".