Kike Morandé: "Solución es que le roben a Camila Vallejo y marchemos"

SANTIAGO.- Visiblemente ofuscado se vio al animador televisivo Kike Morandé esta mañana, luego que anoche sufriera el que enumeró como el tercer robo que ha vivido en su propiedad ubicada en La Dehesa, pese a que esta vez las pérdidas materiales fueron menores.

Morandé entregó su testimonio en el programa matinal "Mucho Gusto" de Mega y se mostró especialmente desilusionado por la seguridad privada que había contratado y pintó un oscuro panorama sobre la delincuencia en el país.

"Yo lo dije medio en broma, pero la única solución es que le entren a robar a la Camila Vallejo y hagamos una marcha, y que con la marcha afloje (el Fiscal Nacional, Sabas) Chahuán. O que nos encapuchemos y dejemos una 'cagada'", dijo Morandé en el espacio televisivo.

Morandé añadió que inicialmente había pensado que el alza de la denominada "fiesta de la delincuencia" iba a "terminarse en el gobierno actual, pero yo creo que la fiesta no se puede terminar nunca".

El animador criticó al fiscal nacional por la polémica que protagonizó con el Gobierno respecto a la delincuencia. "Van a pasar los cuatro años de gobierno con (el ministro Rodrigo) Hinzpeter peleando por la Tolerancia Cero y el otro (Chahuán) dice que no está todo tan mal", declaró Morandé.

El animador, en conversación con José Miguel Viñuela, Patricia Maldonado y Javiera Contador, aseguró que en esta ocasión el robo fue mínimo, ya que los ladrones sustrajeron tres relojes de marca falsificada, que había comprado especialmente pensando en una eventualidad como esta. "Hoy cuando los vayan a reducir y les van a dar dos lucas por cada uno", aseguró.

El rostro televisivo, quien agradeció que "no le pasó nada a nadie" durante el atraco, añadió que este robo no fue como la primera vez que ingresaron a su residencia en La Dehesa, el 2001, ocasión en que las pérdidas fueron cuantiosas. "A mi me robaron más de $100 millones la primera vez. Son los ahorros de toda una vida", dijo Morandé, quien desde entonces decidió con su familia nunca más tener objetos de valor al interior de su residencia.

Morandé fue especialmente crítico con los servicios privados de seguridad, ya que él contrató dos compañías y ninguna llegó en un tiempo prudente para atender el caso. "Debe ser el mejor negocio del mundo. Calcúlate las lucas que juntan", manifestó.