La emblemática banda nacional tocó canciones de su disco infantil, ''Travesura''.
El Mercurio (Archivo)SANTIAGO.- Con puntualidad empezó a sonar la música en los diversos escenarios alternativos del encuentro. Quince minutos pasado el mediodía, salió a trabajar bajo el sol el cantante francés Adanowsky que escogió el festival Lollapalooza para hacer una despedida pública de su reciente disco, Amador (2010).
El hijo de Alejandro Jodorowsky terminó el show a torso desnudo y con actitud de rockstar a todo evento, seguido luego por el rock de guitarra de los brasileños Plebe Rude.
También a partir del mediodía, esta vez bajo techo en el escenario de la cúpula, se inciaba la actividad del recinto que, para la versión 2011 de este mismo espectáculo, colapsó por la afluencia de público.
En contraste, al menos al comienzo, fue un puñado de fieles el que llegó a escuchar a las primeras bandas del programa, entre el rock de Dion y el rockabilly de Calavera Beat.
En paralelo, el escenario para niños Kidzapalooza, arrancó con la entusiasta banda de rock Mosquitas Muertas, y ya se había reunido más de un millar de personas para presenciar la actuación de Inti Illimani Histórico.
El conjunto chileno se basó en el repertorio ad-hoc de su disco infantil Travesura (2010), y sorprendió con dos nuevas versiones: una con la cantante de La Mano Ajena, María Fernanda Carrasco, y otra con el grupo de música gitana en pleno para tocar juntos "El mercado Testaccio".