Un disco remitido desde España a lo largo y ancho del océano y recibido en la Patagonia chilena es hasta la fecha el envío más distante que el músico chileno Miguel Conejeros ha hecho de nueva grabación. "La copia más austral del mundo", dice el autor, y se ve como un gesto distintivo: en medio de la era digital todavía es posible despachar un ejemplar físico de un disco al otro lado del mundo, y además prensado en vinilo.
Ese disco se titula
The voices from hypothalamus, y Conejeros se llama Fiat600, o F600 a secas, cuando trabaja como músico y productor. Es un EP de seis pistas que marca además un reencuentro formal con un viejo colaborador: Jorge González. Está escrito y reconocido que el cantante de Los Prisioneros compuso su mayor hit, "El baile de los que sobran" (1986), en una batería programable que pidió prestada a Conejeros algún día a mediados de los '80 en Santiago. Ahora, F600 acaba de editar su nuevo disco por medio del sello de música electrónica que González ha instalado en España, Nice Cat Records.
Desde luego hay mucha más historia entre esos dos episodios. Miguel Conejeros integró en Chile grupos como Pinochet Boys en los '80 y Parkinson en los '90, sonó en las radios locales con éxitos de esa banda como "Papel floreado" y "El vino", se estableció en Barcelona en 2001 y hasta la fecha suma con F600 un catálogo que incluye los discos
El empleado del mes (1997),
Sombras tenebrosas (1998),
El último día (2000),
Erich Zann (2002) y los más recientes
Download (2008) y
At home like a tourist (2011), estos últimos editados por los sellos digitales chilenos Epa Sonidos y Pueblo Nuevo.
Por su parte, Nice Cat Records suma ya cinco ediciones, compartidas entre el dúo Los Updates (de Jorge González y Loreto Otero), el músico y DJ chileno Ricardo Villalobos y el músico y cantante venezolano Argenis Brito, entre otros. Son
Driving nowhere (2009), de Villalobos y Los Updates; el EP
They advised us not to sing (2010), de Los Updates;
Los Updates vs. Argenis Brito (2010), de los mismos músicos anunciados en el título, el EP
Joli chat (2011), de Villalobos, Los Updates y Anthony Collins, y el mencionado
The voices from hypothalamus (2012), de F600, que ha obtenido críticas elogiosas en medios especializados como la revista alemana "De:Bug".
Ya a su anterior paso por Chile, a comienzos de 2011 para tocar en vivo
At home like a tourist, Conejeros estaba colaborando con González en una remezcla de la canción "Demanding cat". Ahora ese trabajo se puede escuchar en el más
reciente podcast de Nice Cat, que consiste en música del sello remezclada por F600. "Además he incluido ese tema en algunos directos y entiendo que el Jorge también", escribe F600 desde Barcelona. "Y estamos pensando en sacar digitalmente un recopilatorio del sello con temas y remezclas que no se han publicado aún y allí seguro estará".
-En la reseña de "De:Bug" aluden un par de veces a lo de la vieja escuela que hay en tu música, de cuando "la discoteca todavía era underground", dicen. ¿Le achuntan, dirías que tienes esa marca de venir tocando desde antes?
-Yo diría que sí que le achuntan y pienso que en mi música sí que hay una marca como
old school, en las estructuras, en el sonido, en algunos timbres, pero sobre todo en una manera de aproximarse a la composición de forma más relajada, sin tanto encasillamiento en etiquetas puntuales. No es que esta forma de producir sea ni mejor ni peor, sino que es una manera de abordar el proceso creativo desde un punto de vista quizás más lúdico y desprejuiciado. Y desde luego le achuntan comentando que ahora lo que se entiende por discoteca no tiene nada que ver con la cultura underground que un día salió de ahí.
-Uno de los temas de tu disco es una remezcla de "Miss you so", una canción de Los Updates con Ricardo Villalobos. ¿Cómo es el tema original y cuánto lo transformaste?
-En realidad cuando me encargan algún remix sólo escucho una vez el original, y algunas veces ni siquiera lo escucho entero, para influenciarme lo menos posible de él. Cojo las partes y voy dejando que sea la música la que me sugiera el camino a seguir. De este tema se hicieron varios remixes de otros artistas y se editaron
en digital, y de alguna manera diría que mi versión se aleja del resto. Por ejemplo no hago mayor énfasis en el 4/4 clásico del
house, sino que he intentado alargar los
breaks hasta conseguir algo que me sugería un ritmo diferente e hipnótico, además de jugar con las voces originales de manera diferente.
-A propósito de eso, éste es el quinto disco del sello después de otros de Los Updates, Argenis Brito y Ricardo Villalobos. ¿Hay afinidades musicales entre todos ustedes, cuáles son?
-Desde luego es Jorge con su buen criterio, apertura de mente y amor a la música el que ha logrado reunir todos estos nombres bajo su sello. Queda claro que la orientación musical de Nice Cat Records es hacia los
beats y la pista de baile y bajo ese formato las lecturas e interpretaciones de cada artista son bastante personales, lo que enriquece mucho el catálogo y la gama de colores que se ofrece.
-¿Se puede comprar el vinilo acá en Chile? ¿Y tienes planes de venir a tocar de nuevo este año?
-El disco se puede comprar desde cualquier punto del planeta, incluso desde la Patagonia si se quiere, de hecho doy fe que desde ahí se han llevado un par de copias -dice, con todo el catálogo del sello disponible en distribuidoras como
DNP, Juno o Discogs-. Y me gustaría mucho ir a tocar a Aysén. Pero ir a tocar a mi Chilito lindo no depende cien por ciento de mí: esto pasa porque los promotores chilenos se acuerden de los músicos de su tierra que muchas veces son incluso más interesantes que algunos DJs o músicos que programan en los clubes criollos, personajes que en muchos casos no le han empatado a nadie. Pero claro, tienen nombre gringo y eso siempre queda mejor. Hay cosas que nunca cambian.
