Los más emblemáticos artistas de los 80 vuelven a juntarse en una nueva muestra

SANTIAGO.- Algunos de los artistas que han levantado movimientos culturales en Chile se tomaron en serio la tarea: Bautizaron sus grupos con un nombre elocuente, establecieron una serie de códigos que debían respetarse y determinaron quiénes podían formar parte.

Otros, en tanto, lograron dejar una huella común prácticamente sin proponérselo. Es el caso de la llamada Generación de los 80 de la pintura nacional, que reunió a figuras como Samy Benmayor, Matías Pinto D'Aguiar, Bororo y Pablo Domínguez, entre otros.

En un inicio, había allí sólo amistad. Compartían una actividad, además de talleres y jornadas de conversación y juerga, pero no un decálogo artístico. Al respecto, lo que los aglutinaba era sencillamente "la libertad de espíritu, dejar en paz al otro, que cada uno haga lo que le dé la gana hacer", recordaba Benmayor en 2008.

Tal vez por eso es que debieron pasar dos décadas, hasta 2004, para que el grupo tuviera una primera exposición conjunta, que luego tendría sucesivas réplicas en lugares como la Galería Trece, el Museo de Artes Visuales y la Corporación Cultural de Las Condes.

Pero como el entusiasmo no decae, la saga agrega hoy un nuevo capítulo, con la apertura de una nueva muestra que reúne a algunos de los principales nombres de esos años, incluso con obras producidas entonces y nunca antes exhibidas.

Se trata de "Arte chileno de los 80", la muestra que Galería Artium tendrá abierta al público hasta el lunes 30, y que reunirá trabajos de Bororo (Carlos Maturana), Benmayor, Pablo Domínguez, Omar Gatica y Pancha Núñez, entre otros.

Pinturas, grabados y esculturas se encuentran entre las cerca de 20 piezas que integran la exposición, y que Luz Barros, directora de Artium, define como "obras atípicas y con valor histórico, creadas en momentos especiales de la vida de los artistas, durante viajes y estadías en lugares específicos".

La muestra busca rescatar los códigos comunes en la producción del grupo, por lo que intenta centrarse en el vigor gestual y el arrojo cromático que llevaron a ubicar a los artistas en el llamado neoexpresionismo chileno.

La pugna conceptual entre los artistas plásticos y ciertas vanguardias de la época, con predominio de expresiones como instalación y performance, además del convulsionado ambiente de los 80, también se transmiten en las obras.

La muestra se podrá visitar en Alonso de Córdova 3102, de lunes a viernes entre 10:00 y 19:00 horas, y el sábado de 11:00 a 13:30 horas. La entrada es liberada.