"Es como desempolvar los álbumes familiares antiguos y decir 'qué bien lo pasamos en esas vacaciones' o 'el peinado feo que tenía la tía'", dice entre risas Nano Stern. Pero el cantante no tiene fotografías a la vista, sino canciones, tantas como para decidir detenerse un rato y volver a mirarlas con ánimo retrospectivo.
La razón no es muy distinta de la que lleva a cualquiera a embarcarse en un repaso: Un aniversario redondo. Exactamente cinco años alcanzados en 2011 desde la edición de su primer disco (Nano Stern, 2006). A partir de entonces, vino una prolífica carrera de cuatro álbumes, que Stern decidió revisar en vivo este domingo 6 de mayo en el Teatro Nescafé de las Artes.
"Hacer un concierto grande, sin el pie forzado de lanzar material, sino de celebrar, es para mí el punto clave. Y celebrar no en un jolgorio constante, porque no es la característica de mi música. Son gamas diferentes que estarán presentes ese día, pero bajo el concepto de que estamos felices de estar ahí, y que esto es también un reconocimiento a toda esa gente, porque éste es un viaje conjunto. Es una oportunidad de hacer un viaje largo y tendido, y vamos a revisar cada disco. Serán más de 20 temas. Así es que la gente que se prepare, que se haga masajes en el potito", amenaza con humor el cantautor.
Junto a los cerca de diez músicos que hoy lo acompañan, Stern mostrará entonces fotos escogidas de este período, con espacios tanto para las entrañables vacaciones familiares como para la tía del peinado feo. En ese repaso, el primer disco, el que marca el hito, tendrá un lugar especial.
El cantautor ahora lo mira con algo más de distancia, pero también con espacio para su propia sorpresa: "Hoy puedo reconocer en ese disco las semillas. Inocentes, pensando en que esas canciones las compuse entre los 17 y los 19 años. Las letras son bien teenager, hablan de cosas gigantescas, pero desde un lugar de convicción absoluta. Eso es súper entrañable. Ahora, diez años después, miro para atrás y digo 'qué ganas de sentarme a escribir así, tan despojado y tan carerraja'. Decir 'somos uno solo, la muerte no vendrá', cosas que hoy jamás escribiría, pero que escribí, y me tengo que hacer cargo, aunque desde un lugar de cariño. Es casi como que lo hubiera escrito otra persona, y hoy esa otra persona me viene a cantar. A veces me gusta, otras no, pero bacán igual".
Fotos de Latinoamérica
Luego de Nano Stern (2006) vinieron Voy y vuelvo (2007), Los espejos (2009) y Las torres de sal (2011), cada uno con inquietudes distintas, aunque con una característica común: "Todos los he hecho con honestidad. Eso no implica que me gusten todos. Todo lo contrario, uno va cambiando, las estéticas vuelan y a veces te desencuentras. Pero justamente por eso es bacán poder retocar esas canciones hoy".
Ese "retoque" estará dado precisamente por lo más fresco en la producción de Stern, Las torres de sal, un disco de estética más cruda y de rasgueos marcados e intensos. "Quiero mantener esa estética. El primer disco es totalmente distinto, lo grabé todo yo. Ahora somos una banda, mucha gente, así es que lo abordaremos como equipo. Revisaremos las canciones con un gran cariño a lo que fueron en su origen, pero sin miedo. Si no he sido ortodoxo para tocar otras músicas, menos lo seré con mis canciones", advierte.
Y si de esa falta de ortodoxia habrá prueba este domingo en el Nescafé de las Artes, seguro que la habrá aún más en el próximo trabajo discográfico del cantautor: Se trata de un disco dedicado a la música latinoamericana, con versiones de clásicos chilenos, argentinos, peruanos y venezolanos, entre otros, y que ya está grabado en un 80 por ciento.
Un álbum de canciones nuevas, en tanto, podría ver la luz el próximo año, "si no es muy atolondrado", dice aludiendo a su registro de cuatro trabajos en seis años. "Estoy en un momento más tranqui, haciendo un ejercicio conciente de controlar mi ansiedad, de decirme que esto no es una carrera contra nadie (...). Volviendo al álbum de fotos, es fome cuando te muestran 1.500 de un mismo álbum, así es que es bonito dejar que pase el tiempo, para después publicar un álbum de otro viaje".