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"Lo que hacemos sigue siendo tango"

"No mezclamos, no hacemos ninguna mixtura", dicen en este elenco bonaerense, que sin embargo se ha caracterizado por inocular una nueva energía al tango. "Hay rock, música clásica y hay mucho tango escuchado desde la infancia", explican, a horas de sus presentaciones en Temuco y Santiago el 11 y el 12 de mayo.

11 de Mayo de 2012 | 10:43 |

Se han vuelto viajeros frecuentes a Chile, pero en cada regreso la argentina Orquesta Típica Fernández Fierro suele traer un detalle nuevo que sumar a su experiencia. Debutaron en enero de 2006 en un festival de tango en Valparaíso, regresaron dos veces en 2007 y una tercera en 2011 cada vez en conciertos frente a un público creciente, y en 2012 volverán a apostar por la descentralización, con la primera fecha que cumplirán este viernes 11 de mayo en Temuco para aterrizar en Santiago el sábado 12 (ver recuadro).

Son los nuevos conciertos en Chile de esta agrupación iniciada en 2001, que defiende una vocación por renovar el repertorio tanguero con composiciones inéditas y de autores jóvenes, pero que al mismo tiempo mantiene la conformación de una orquesta típica de tango, conformada por Federico Terranova, Pablo Jivotovschii y Bruno Giuntini (violines), Charly Pacini (viola), Alfredo Zuccarelli (violonchelo), Yuri Venturin (contrabajo), El Ministro (Flavio Reggiani), Eugenio Soria, Pablo Gignoli y Julio Coviello (bandoneones), Santiago Bottiroli (piano) y Walter Chino Laborde (voz).

El grupo tiene sede en el escenario bonaerense del Club Atlético Fernández Fierro, y suma giras por América y Europa en su bitácora. Estuvieron  comienzos de año en Sao Paulo, Brasil, y en julio se aprestan a una gira por festivales europeos. "Pero ahora lo importante son las dos fechas de Chile", dice por teléfono desde Buenos Aires antes de su llegada el violista de la orquesta, Charly Pacini.

-¿Cómo es esa relación de la orquesta con Chile, ahora que vuelven por sexta vez?
-La relación se da en Santiago y también aquí en Buenos Aires: hay mucha gente de Chile que está viviendo aquí o viene de vacaciones y por suerte es un público al que le gusta salir y viene al club. Las veces que hemos ido a Chile ha ido creciendo. La primera vez en un festival de tango en Valparaíso, y luego hemos hecho fechas sólo con conciertos nuestros, que han sido muy importantes para mostrarnos a un público que no es tan fácil, y menos con el tango.

-¿No es fácil porque conoce el tango o porque no lo conoce?
-Porque lo conocen. Pasa lo mismo que en Uruguay: la cercanía y el conocimiento del género hacen que sea un público difícil. Hay una cosa de sensibilidad musical que se da con el tango sobre todo en los países aledaños a Argentina, ¿no?: Brasil, Uruguay, Chile... no hemos ido todavía a Paraguay ni a Bolivia, lamentablemente, pero en estos tres que conocemos hay un público que se conecta, está bueno eso por el enganche que hay, el público lo acepta y lo entiende.

-¿El público de la orquesta es de la edad de ustedes, o también atraen a una audiencia mayor, que escucha tango de la vieja guardia?
-Sí, eso pasa en Argentina y afuera también. Ya es un público que sabe, conoce más o menos cuál es la propuesta de la orquesta, que es revitalizar el género, hacer repertorio nuestro, con varios tangos que son de autoría de la orquesta. No hacemos covers. Con las viejas generaciones del tango costó un poco esto de revivirlo con otra propuesta. No es tanto un cambio musical, porque lo que hacemos sigue siendo tango, no mezclamos ni nada, no hacemos ninguna mixtura. Pero la propuesta de las letras sí es nueva y se necesita cierto tiempo para acostumbrar el oído. Hay una mezcla de público sobre todo en estos últimos dos años, que no es sólo gente joven que se engancha con la orquesta. Hemos hecho un lugar en una propuesta original de revivir un género con una orquesta tradicional pero con canciones nuevas y con una mirada personal y propia.

-Acá en Chile el equivalente a esa generación mayor creció escuchando a orquestas como las de Alfredo de Angelis, Rodolfo Biagi, Miguel Caló. ¿Esos son referentes importantes para ustedes, o sus gustos son más recientes, de Piazzolla en adelante?
-Hay un nexo común que es Piazzolla, pero a la vez ese nexo común es con (Osvaldo) Pugliese, con (Aníbal) Troilo y con todas las orquestas que hemos escuchado, algunas  incluso sin saber cuáles son, que es algo que también pasa con la nueva generación: conocen los tangos, les gusta un cantor o un sonido de tal orquesta pero no saben quiénes son. El bagaje cultural tanguero del setenta por ciento de la orquesta viene de esa manera, de escuchar. Venimos con el tango, pero hay muchas influencias de otros estilos que confluyeron en juntarse en una orquesta. Hay rock, música clásica y hay mucho tango escuchado desde la infancia. Pero no hay un fanatismo. Lo que hay es un estudio y un gusto por no hacer un mamarracho del estilo.

-¿No es paradójico que haya algo de rock en el grupo pero que al mismo tiempo no mezclen nada, como dices? No hay fusiones.
-No, no hay fusiones. Lo que suele confundir a veces es cómo sonamos: la  cuerda, los bandoneones pueden tener una intención o una idea más parecida al rock o al hard rock. Pero es una confluencia de gustos, de géneros, que se da solamente cuando los doce nos juntamos para tocar en la orquesta. No hay una cosa cerrada con el tango: la orquesta nació así y ese concepto de hacer tango viene desde nuestra historia personal. Tenemos otro toque: lo único parecido a mixtura que puede hacer es justamente esa conjunción a través de nuestra historia más rockera o de otros estilos musicales.

-No es una mezcla explícita con una guitarra eléctrica o una base electrónica, por ejemplo.
-Claro, y esa mirada también está en la poética, de buscar imágenes no tan asociadas a los lugares comunes de las letras del tango, que siguen pasando, son los mismos: la soledad, el abandono, el hastío, el dolor, el amor. El acercamiento nuestro es de otro lado.

Con cinco disco grabados entre Envasado en origen (2002), Destrucción masiva (2003), Vivo en Europa (2005), el DVD Tango antipánico (2005), Mucha mierda (2006) y Fernández Fierro (2009), la Orquesta Típica Fernández Fierro llegará a Chile con una flamante edición en vinilo de ese último trabajo. "Primero está la experiencia de tener el disco en las manos, ver la la foto del tamaño del long play y toda esa ceremonia de sacarlo del sobre, mirarlo, olerlo. La mayoría de nosotros tenemos tocadiscos desde chicos, hay un gusto desde niños por escuchar música de esa forma".

-Es primera vez que la orquesta va a tocar en el sur de Chile, en Temuco. ¿Alguna expectativa?
-Siempre vamos a la aventura. No teníamos idea de cómo era cuando fuimos la primera vez a Santiago, y nos sigue pasando lo mismo cada vez porque descubrimos lugares nuevos donde vamos. En Temuco tenemos esas mismas ganas, de descubrir la ciudad con el poco tiempo que tenemos ahí.

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