La actriz desmintió las acusaciones a través de su abogado.
APLOS ANGELES. Por malos tratos y despido injustificado fue demandada la actriz estadounidense Sharon Stone por parte de su ex empleada doméstica. La trabajadora filipina asegura que la musa de Hollywood la agredía con comentarios vejatorios por su raza y religión.
En una demanda presentada el martes en Los Angeles, Erlinda Elemen acusa a Stone de haber equiparado ser filipino con ser estúpido y de ordenar a la niñera que no se expresara delante de los niños para que "no hablen como tú", habría afirmado.
La protagonista de "Bajos Instintos" también le habría prohibido a Elemen, que fue despedida el pasado año, que leyera la Biblia en su casa, pese a que la niñera vivía en casa de la actriz para cuidar de sus tres hijos y viajaba frecuentemente con la familia.
Desde agosto de 2010 Elemen "fue sometida repetidamente a comentarios vejatorios e insultos relacionados con su origen y cultura filipina", se describe en la demanda de 17 páginas.
El representante de la estrella afirmó que la demanda era "absurda" y alegó en un comunicado que la ex niñera estaba tratando simplemente de sacar dinero a la actriz.
Elemen, que fue contratada en octubre de 2006 y ascendida dos años después a trabajo puertas adentro, fue despedida en febrero de 2011 después de que Stone se enterara de que recibía un sueldo extra cuando viajaba con los niños, así como en los periodos vacacionales.
Stone le dijo entonces a la empleada que no tenía derecho a recibir una paga adicional y "acusó a la demandante de 'robarle' cobrando ese dinero extra, además le dijo a la demandante que era 'ilegal' haber disfrutado de esas pagas y le pidió que le devolviera el dinero".
La demanda de Elemen pide una cantidad indeterminada de salarios no percibidos, así como una indemnización por daños y perjuicios, además de buscar que el caso sea juzgado por un tribunal.
"Esta es una demanda absurda, presentada por una ex empleada descontenta que está tratando obviamente de conseguir dinero de cualquier forma posible", afirmó el representante de la actriz.
"Es una demanda frívola por unas reclamaciones absurdas que fueron inventadas y fabricadas", añadió.
El año pasado, la actriz fue condenada a pagar 232 mil dólares para compensar a un trabajador que se lesionó en la rodilla tras resbalarse y caerse en el jardín de la actriz en 2006.