BUENOS AIRES.- Este sábado se inaugurará en Argentina el Museo del Humor de Buenos Aires, con la instalación de una Mafalda gigante de 10 metros y unaexposición que repasará más de dos siglos de viñetas en uno de los países con "mayor producción de humor gráfico del mundo", según explica su director, Hugo Maradei.
Dirigido por un equipo de cinco dibujantes argentinos, entre ellos algunos tan conocidos como Joaquín Salvador 'Quino' o Guillermo Mordillo, que conforman su Consejo Honorario Directivo, el Museo del Humor contará en su primera exhibición con una exposición de otro de sus directores honorarios, Carlos Garaycoechea.
"Este grupo de cinco dibujantes tomará decisiones en cuanto a las muestras que se realizan y en cuanto a las adquisiciones que irá haciendo el museo", aseguró Maradei, que destacó el gran valor de la muestra principal, que repasa 200 años de historia del humor gráfico argentino.
Con más de 150 artistas representados, las viñetas que se pueden ver en este museo, situado en la antigua cervecería 'Munich', frente al Río de la Plata, reflejan la fértil tradición de la viñeta en el país, y especialmente en Buenos Aires, que ganó gran fama internacional entre los humoristas desde principios del siglo XX.
"Durante los años 20 los dibujantes venían a Buenos Aires de la misma forma que los escritores iban a París", enfatizó el director del museo.
Maradei apuntó como causas del éxito tradicional del humor gráfico en Argentina tanto la gran abundancia de dibujantes, muchos de ellos llegados de la inmigración española e italiana, como el gran número de medios de comunicación y revistas premiadas internacionalmente inauguradas en el país.
"Prueba de ellos es la cantidad de artistas gráficos argentinos que hoy en día trabajan en el exterior", agregó el director del museo, que destacó a Quino y Mordillo como sus máximos representantes.
La Mafalda gigante fue elaborada por la compañía francesa 'Les Plasticiens Volants'.
Dentro de la muestra también se podrán ver proyecciones de dibujos animados, una disciplina en la que también Argentina fue pionera, ya que, según Maradei, la primera producción de dibujos animados del mundo fue 'El Apóstol' (1917), del italiano Quirino Cristiani, una obra satírica dedicada al entonces presidente Hipólito Yrigoyen.