Los vampiros también deambulan por Chile, en reciente estreno literario nacional

SANTIAGO.- Sofía Sandoval, curadora de una importante galería de arte en Alonso de Córdova, cree que a los 27 años realmente tiene el control de su vida y que ya nada podría sorprenderla. Sobre todo, tras el quiebre con Andrés, su celoso ex novio. Sin embargo, cuando Robert Clief —un cliente inglés de visita en Chile— entra por la puerta de la galería, Sofía descubrirá que su vida ha dado un giro importante. No sólo porque Robert es bien parecido, elegante y culto. Lo que realmente importa es que él es... un vampiro. Y no será el único.

"Samsara: Bienvenida, eternidad" (Sin Límites, $10.000), de la periodista chilena Soledad Arriagada, es un nueva incursión nacional en el ámbito de los vampiros en tierras chilenas. Una novela que combina misterio, romance y mucho arte, sobre todo cuando la trama y sus protagonistas viajan a Londres y Venecia.

Sol Arriagada trabajó varios años en radio como reportera, productora y editora. Es fundadora del sitio www.medioaparte.cl, portal especializado en música, eventos, cine e ilustración. Y confiesa que su relación con los vampiros —que le interesaban desde muy pequeña— se consolidó a los 12 años, cuando en 1994 vio en el cine "Entrevista con el vampiro", cinta basada en la novela homónima de Anne Rice.

-¿Cuándo y cómo nació la idea de escribir "Samsara: Bienvenida, eternidad"?
-Más que las ganas de escribir este libro en específico, nacieron las ganas de escribir. La novela no nació con una idea fija, de que los protagonistas deberían ser vampiros, fue un proceso en el que se fue creando la idea mientras escribía, en 2009. Estoy muy contenta con el resultado total, pues siempre había tenido la inquietud de escribir una novela. Anteriormente, había hecho sólo cuentos y en su mayoría poemas que quedaron dentro del entorno, ya sea de amigos o de la universidad.

-No han sido muchas las novelas de vampiros ambientadas en Chile. ¿A qué lo atribuyes?
-Entiendo que son sólo tres novelas, incluyendo la mía. Creo que puede ser porque los vampiros son considerados seres con más historia y en ese caso a la mayoría le puede causar interés crear vampiros de otros países, sobre todo europeos, porque les pueden dar más contexto. Creo que a la larga en mi novela hay vampiros chilenos, que coexisten en esta especie de jerarquía de vampiros en otros países, pero la historia se centra en la protagonista, una chilena que llega a conocer todo ese mundo y organización.

-¿En qué se diferencian tus vampiros de los que abundan en las novelas de romance paranormal tipo "Crepúsculo"?
-Creo que principalmente es la idea del motivo por el que se dejan convertir en vampiros: hay amor detrás, pero también hay sufrimiento, venganza o ambición. Todos esconden una historia, donde los une el karma de vidas anteriores y cada uno tiene su razón para pelear por su propia finalidad. Quizás otra diferencia es que está muy presente la idea de que algunos personajes no sienten culpa de beber sangre de humanos. Saben que es parte de su cadena alimenticia, así como lo fue comer carne siendo simples humanos, y así lo plantean; no hay culpa cada vez que un humano muere por causa de ellos, tampoco hay remordimiento en deshacerse de los cuerpos de quienes se han alimentado.

-Hace un tiempo Guillermo del Toro publicó su Trilogía de la Oscuridad, donde retrata a los vampiros como verdaderos monstruos, lo que contrasta con la imagen creada por Stephenie Meyer. ¿Qué perfil crees que se ajusta más a los tiempos actuales?
-Creo que los vampiros, dentro de mi idea de literatura, han evolucionado. Son monstruos, es cierto, pero de esos que ahora forman parte de la tecnología y el capitalismo. Son seres bellos, porque saben que así pueden cazar más dentro de una sociedad que muchas veces puede ser superficial. Andan a la luz del día o al menos lo intentan, porque el ritmo de vida que llevan los hace querer estar presentes. Es quizás un tema de ego, pero lo que destaco principalmente es que cada uno en su mundo o donde se desarrolla, se ha esmerado por ser exitoso, cansados quizás de haber sido personajes despreciados. Disfrutan de su propia capacidad de atesorar cosas que luego serán reliquias, por lo mismo viven en un mundo ostentoso. Creo que mi idea de personajes, es que ellos "crecieron" en la mitología de ser monstruos desagradables, y es eso exactamente lo que no quieren ser más; en su mayoría son ególatras y egoístas. Desean parecer perfectos y eso les hace más fácil conseguir sus metas en una sociedad que se basa en el cómo te ves o el qué dirán.

-Muchos opinan que los vampiros están agotados como personajes protagónicos, ya sea en libros, películas o series de televisión. ¿Qué opinas?
-Creo que los vampiros son siempre tema, hoy quizás más, impulsados por el fenómeno  "Crepúsculo". Sin embargo, siempre están ahí, provocando encanto y desencanto. Para mí son personajes que siempre me han gustado, aunque no estén de moda. No obstante, eso es lo que son para la mayoría, una moda que va y viene, así como la ropa o la música.
Otros temas también se considerarán eventualmente como agotados, por ejemplo, el fin del mundo. Cuando haya pasado lo de la profecía maya y todo siga igual, entonces volverá sólo cuando alguien o algo más lo ponga de moda. Así fue en 2000, así es este 2012 y así será más adelante con alguna otra profecía. Así también ha sido con "Nosferatu", "Drácula", "Entrevista con el vampiro", Stephanie Mayer e incluso (la serie de televisión) "True Blood". Son tendencias que van y vienen, y que sólo los fanáticos mantienen.

-¿Cuáles son tus próximos proyectos literarios?
-"Bienvenida, eternidad" está pensado como saga, principalmente porque la historia al momento de escribirla hace tres años, fue avanzando así. La siguiente parte está lista, esperando ver la luz. La historia continúa y lleva más atrás en esta idea del karma que los persigue. Sin embargo, tengo dos historias más que van avanzando y esperan su oportunidad. Creo que el tema del karma me llama mucho la atención, por eso una de ellas tiene ese hilo conductor también y la otra es de ángeles. Creo que la ficción es lo que más me llama la atención: crear personajes, momentos e instancias que saquen al lector de la rutina y de la realidad.