Iglesias recibió una elevada cifra de euros por el cargo que le otorgó el gobierno de Valencia, pero al parecer otro contrato establecía un pago superior.
EFEVALENCIA.- Un juez de la ciudad española de Valencia suspendió la declaración que debía hacer mañana martes el cantante Julio Iglesias, que estaba citado como testigo en relación a un caso de presunta corrupción, por los pagos que recibió de la administración regional valenciana.
El juez investiga si hay indicios de delito en la forma en que se realizaron esos pagos del Instituto Valenciano de Exportación (IVEX) al artista.
Fuentes judiciales informaron que el titular del juzgado supo hoy que Iglesias había declarado sobre el mismo asunto el pasado mes de mayo ante un juez en la República Dominicana, donde tiene su residencia, por lo que suspendió la declaración del cantante hasta recibir esa declaración ante la justicia dominicana.
La citación de mañana coincidía con la actuación este fin de semana de Julio Iglesias en el Palacio de las Artes de Valencia, a escasos metros de la Ciudad de la Justicia donde debía prestar declaración.
El caso que investiga un juzgado de instrucción de Valencia se refiere a una supuesta malversación de fondos en los pagos del IVEX al cantante , que en diciembre de 1997 fue contratado por el gobierno regional de Valencia como embajador cultural, para promocionar sus productos en el extranjero.
El Partido Socialista (PSOE) presentó una querella en 2004 ante el Tribunal Supremo contra diecinueve consejeros del IVEX por supuesta malversación en relación con los pagos a Julio Iglesias entre 1997 y 1999.
La querella alegaba que el contrato que se hizo público establecía el pago al artista de 2,2 millones de euros, pero que hubo un "contrato B" que presuntamente se ocultó al parlamento autonómico, y que elevaba esa cantidad a 5,9 millones libres de impuestos.
El Tribunal Supremo se declaró no competente para juzgar el caso, pero la Audiencia de Valencia reabrió el archivo hace un año y ordenó al juez que citara a declarar al cantante y a otras personas.
Los partidos de la oposición habían denunciado que Iglesias había actuado varias veces en la ciudad a escasos metros del juzgado, sin que éste "pudiera localizarlo".