Chris Marker ejerció también una fuerte influencia en cineastas que se dedicaron a la ciencia ficción.
ArchivoPARÍS.- El cineasta, poeta, escritor, filósofo y crítico francés Chris Marker, con una larga trayectoria en la producción de documentales y un lazo imborrable con Chile, falleció este domingo en París a los 91 años, según informaron hoy medios galos.
Marker encarnaba para la Cinemateca francesa, según recuerda el diario "L'Express", la paradoja de un creador que a la vez que se labró una carrera propia característica, "puso su genio al servicio de los demás, dando lugar a experiencias artísticas y políticas decisivas, como la obra colectiva 'Loin du Vietnam'".
Esta faceta quedó manifiesta en su vínculo con Chile, país que visitó a principios de la década de 1970 junto al cineasta Costa Gavras por la filmación de la cinta "Estado de sitio". Poco después, Marker fue quien logró conseguir e ingresar de forma clandestina las cintas donde Patricio Guzmán registraría su aplaudido documental "La batalla de Chile" y luego lo apoyaría para buscar financiación para completar el montaje.
El presidente del Festival de Cannes, Gilles Jacob, fue uno de los primeros en rendirle homenaje, con un mensaje en la red social Twitter en el que declara al mundo "huérfano" de un "cineasta infatigable, poeta enamorado de los gatos, personaje secreto, inmenso talento".
Nacido como Christian-François Bouche-Villeneuve en 1921, Marker deja una cincuentena de documentales que según la Cinemateca "influyeron profundamente en el cine mundial" y abordaron los principales cambios del siglo XX.
El cortometraje de ciencia ficción "La Jetée" (1962) le dio a conocer además a escala internacional y aumentó su proyección especialmente después de que sirviera de inspiración para la película de Terry Gilliam "12 monkeys", protagonizada por Bruce Willis.
Los medios franceses recuerdan que durante 60 años Marker viajó, escribió y se dedicó a sus temas predilectos, "la nostalgia del pasado", pero también colaboró con conocidos artistas, como Alain Resnais ("Hiroshima mon amour") o Costa Gavras ("Z").
La Cinemateca consideró que de Marker es fruto un "arte de montaje poético" y "una manera desconocida de mirar el mundo", mientras que compañeros como Gavras alaban una trayectoria que se dedicó igualmente a "las luchas obreras y los combates por la emancipación y la independencia".