PARÍS.- Los cubanos de Buena Vista Social Club fueron invitados a un festival que promueve un género musical muy distinto al de ellos: las melodías celtas.
El director del 42 festival intercéltico, Lisardo Lombardía, dijo que no se quiere sugerir que "los mulatos cubanos son de origen céltico", sino que la cultura celta "no se cierra al resto" y no tiene miedo a perder su identidad por el contacto con las otras.
La salud de la música celta, a juzgar por Lombardía, atraviesa de hecho una fase de gran calidad y creatividad, una tendencia constatable "desde hace años" gracias a "una nueva generación sin complejos, que recrea su cultura sin olvidar sus raíces".
No faltan ejemplos de esa evolución más allá de las fronteras iniciales y este año se ha destacado como protagonista del festival a la Acadia, una comunidad de origen francófono establecida desde hace más de 400 años en el este de Canadá, reconocida formalmente como integrante de la diáspora celta.
Las "veladas acadianas" se suman así a una apretada agenda con 120 espectáculos, diez escenarios, talleres y la previsión de alcanzar los 700 mil visitantes, que hacen de este encuentro una referencia en el ámbito de la música y de la cultura celta.
"No somos gente que miramos al retrovisor. Creemos más en el futuro que en el pasado", precisa su director, desmintiendo a quien pueda describir esta cita como un ejercicio de nostalgia.