Miguel, Miguel y Miguel. Bosé muestra las otras dos caras que explota en ''Papitwo''.
EFEMADRID.- Tres millones de copias vendidas y tres años de gira justifican repetir la fórmula de Papito, algo que Miguel Bosé hará con Papitwo, el disco que a semanas de haber sido anunciado finalmente saldrá a la venta mañana. El español incluso no descarta nuevos episodios para esta saga.
La placa repite la fórmula de los duetos que imprimió en la primera edición, con permiso incluso para que "la familia" se repitiera el plato, privilegio que quedó restringido a Alejandro Sanz ("Te comería el corazón"), Juanes ("Partisano") y su sobrina Bimba Bosé ("Shoot me in the back").
A ellos se suma también una nueva escuadra capitaneada por Joaquín Sabina ("Sol forastero") y Juan Luis Guerra ("Creo en ti"), además de Penélope Cruz, Dani Martín o Tiziano Ferro, que se quedaron fuera de Papito por compromisos profesionales.
Bosé acostumbra a contar que ese disco fue un éxito porque su repertorio, construido tras más de tres décadas en la música, permitió que varias generaciones "celebraran" y rememoraran sus propias vidas. Es lo que ha sucedido por ejemplo con Tiziano Ferro.
"Me preguntó si estaba libre 'Amiga' y me explicó que, cuando nos conocimos en Puebla (México), él tenía una historia de amor con una chica que directamente tenía una tesis sobre mí, y que ésa fue la canción de su relación", relata Bosé.
El español cuenta que esta vez nuevamente se ha quedado gente afuera, además de temas, combinación suficiente como para que haya un Papithree. Entre los cortes que cita están "Salamandra" o "Don Diablo", mientras que de los "amigos" aún no han podido sumarse al proyecto figuras como Fito Páez y Caetano Veloso.
A este último aclara que "no lo conozco, pero es como si lo conociera, porque llevo toda la vida cantando con él. Para mí es la mejor voz masculina que existe en el mundo", afirma sobre el brasileño.
Como en Papito, sus clásicos han sido nuevamente actualizados para que suenen "como compuestas ayer". Sin embargo, casi todas sus piezas más rápidas ya se incluyeron en la primera entrega, por lo que esta segunda sonará más tranquilo, lo que cree coherente con una carrera construida "en un 80 por ciento" por canciones lentas o medios tiempos.
Y si lo de "Papito" era sólo un nombre en 2007, para 2011 se transformó en algo literal, cuando Bosé se estrenó como padre de los mellizos Diego y Tadeo, quienes, de todos modos, aún no tienen su canción. "Mis hijos son inspiración para muchas cosas y estoy muy activo a nivel de composición, pero no ha surgido nada que tenga que ver con ellos", afirma.
"Los gozo más cuando los desligo de mi carrera. Si no, sería un infierno, llevándolos para arriba y para abajo. Los niños, tranquilos", cuenta.
Bosé pasó por el Festival de Viña del Mar por última vez en 2008, al alero de la gira de promoción de Papito. Tras el intermedio que representó Cardio, el español volverá a ese escenario en 2013, nuevamente con la fórmula de clásicos remozados gracias a duetos.