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John Malkovich debuta en Chile ante una devota Arena Movistar

El actor presentó en Santiago "The Infernal Comedy", montaje basado en la vida de un real asesino austriaco. El público se rindió a la ejecución del estadounidense, perdonando las fallas técnicas.

05 de Septiembre de 2012 | 00:09 | Por Francisca González, Emol
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El Mercurio

SANTIAGO.- El  Arena Movistar de pie, aplaudiendo al maestro.  Esa fue la fotografía que plasmaron las más de dos mil personas que llegaron este martes a presenciar el debut de John Malkovich en los escenarios locales, a través del espectáculo "The Infernal Comedy" (Confesiones de un asesino en serie).

El montaje, que  el actor exhibe desde el año 2008, está basado en la historia real del austriaco Jack Unterweger, quien fue liberado de una condena por homicidio en 1990, tras supuestamente demostrar con su faceta de escritor que se había rehabilitado. No obstante, cuatro años después, volvió a ser detenido por asesinar a varias prostitutas. Al no soportar una nueva condena, terminó con su vida el mismo día que reingresó a prisión.

La obra de una hora y 45 minutos sigue al personaje tras su muerte, en un relato que desnuda casi por entero su naturaleza criminal mediante una monólogo abierto y franco, dirigido directamente  al público.

La producción de Malkovich intercala los monólogos de Unterweger con el canto lírico de dos sopranos, como también con la puesta en escena de la orquesta dirigida por Michael Sturminger. Los distintos movimientos del relato son musicalizados por la mano del austriaco, otorgando intensidad al relato.

Esta comedia generó devoción y risas en el público, con un relato sarcástico, exento de sutilezas y particularmente oscuro.

El montaje debió sortear obstáculos técnicos durante su exhibición. Problemas en la nitidez de los subtítulos electrónicos fueron quizás los más notorios para la audiencia.

Y es que los diálogos del actor se pudieron seguir con fluidez- excepto por dos interferencias breves- pero no ocurrió lo mismo con la interpretación de las dos sopranos que lo acompañan y que entregan la cuota femenina a los diálogos del personaje.

Pese a esto, la audiencia siguió con entusiasmo la historia del homicida que logró engañar por años a las autoridades austriacas y que, gracias a sus dotes de escritor, obtuvo el perdón de su primera sentencia.

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