SALT LAKE CITY.- Decenas de lenguas aborígenes en el continente americano podrían desaparecer en las siguientes generaciones con la reducción de un importante programa universitario, dijo el domingo un lingüista de Utah.
La Universidad de Utah anunció hace poco el cierre del Centro para las Lenguas Indígenas Americanas debido a una reducción presupuestal y a la salida de su fundadora Lyle Campbell. En su lugar, el Colegio de Humanidades concentrará los esfuerzos de preservación de lenguas tribales de Utah. Reducir la misión pone en peligro la credibilidad académica de la universidad, advirtió Jeff Pynes, un candidato a doctorado que estaba haciendo investigación en el centro de lenguas aborígenes.
Pynes, graduado de Berkeley en 2006, llegó a la Universidad de Utah por su reputación en la preservación de las lenguas. Como parte de su trabajo, Pynes ha realizado decenas de visitas extendidas a los tolupanes y otros pueblos aborígenes de Centroamérica, ha grabado su habla y sus relatos a fin de documentar palabras, sintaxis y gramática.
Ives Goddard, lingüista en el Smithsonian Institution y que estuvo en la junta de asesores del centro de Utah, dijo que la disciplina académica “no se trata sólo de rescatar un pequeño idioma curioso”. “Se trata de aprender sobre la capacidad humana intelectual”, dijo al diario The Salt Lake Tribune. “El objetivo es encontrar el anteproyecto universal para el idioma con el que todos nacemos”.
Se considera que 40% de los 7.000 idiomas del mundo están en peligro. Más de la mitad de ellos se extinguirá en un siglo, según los expertos. El inglés, el español, el francés y el portugués están reemplazando los dialectos hablados por muchos grupos indígenas del continente americano.
Los expertos dijeron que había 280 lenguas en lo que se volvió Estados Unidos, cuando los europeos comenzaron a colonizar Norteamérica en el siglo XVII. Sólo quedan 151, y sólo 20 se transmiten a la siguiente generación, determinó el equipo de Campbell.
El esfuerzo de la Universidad de Utah se debe al fallecido Wick Miller, quien comenzó a grabar a los shoshones hace décadas y creó un archivo. Al llegar a la escuela en 2004, Campbell buscó dar formar al Centro para las Lenguas Indígenas Americanas para defender la diversidad lingüística.
Lanzó una conferencia anual internacional, se asoció con el Smithsonian y aseguró más de 3 millones de dólares en fondos federales. Sin embargo, el centro ha languidecido y pocos estudiantes muestran interés en las lenguas.