La Oreja de Van Gogh dejará que su público escriba la letra de uno de sus temas

MADRID.- La Oreja de Van Gogh lanzó un nuevo proyecto que abre de par en par las puertas de la agrupación española a sus fans, permitiendo que sean éstos los que pongan letra a un nuevo tema.

"En lo que va de año, en Twitter hemos visto más talento literario que en toda la década pasada en el pop español", dijo hoy en rueda de prensa Xabi San Martín, uno de los principales compositores y tecladista de LOVG, en defensa de esta iniciativa que da voz a sus seguidores, y que tiene un antecedente siete años atrás, con un experimento emprendido en su web.

San Martín, junto a sus compañeros Leire Martínez, Pablo Benegas, Haritz Garde y Álvaro Fuentes, presentó en Madrid esta iniciativa que aparece en paralelo con su CD + DVD Cometas por el cielo en directo desde América, una edición especial de su último disco grabado entre México y Argentina.

La página web www.elplanb.tv permitirá a los interesados consultar las bases de participación y seguir el proceso, que será "transparente" y contará con videos publicados semanalmente por los propios miembros del grupo, que filtrarán y elegirán las colaboraciones con el fin de confeccionar el texto definitivo, que verá la luz a principios de 2013.

¿El objetivo? "Aprender del público", dijo Garde, y "que la gente sienta lo que sentimos nosotros, se enfrente al reto de escribir una letra y consiga transmitir", añadió Benegas.

Para ello, destacó San Martín, han "abierto las puertas de la cocina" para trabajar como trabaja LOVG, esto es, a partir de "un esqueleto" de la canción, con una línea de melodía muy clara y una instrumentación neutra sobre la que erigir esa letra.

Una aplicación informática habilitada en la web permitirá incluso comprobar cómo suena esa letra gracias a un procesador de voz que ellos, familiarmente, llaman "la japonesa".

"Una letra lo cambia todo", destacó Leire Martínez, cantante de LOVG, quien animó a participar a todo aquel "que tenga una historia que contar y talento" para ello.

El experimento podría concluir en que sea una única persona la autora total del texto o que, como "un Frankenstein", sean varios los aportes que conduzcan a la canción final, que en principio no está pensada para incluirse en ninguno de sus discos.