Los Rolling Stones terminaron el concierto a las 23:00 horas, y tenían permiso sólo hasta las 22:30.
APLONDRES.- Recibieron elogios, fueron aplaudidos por la crítica y lograron satisfacer las expectativas de sus admiradores, pero el primer concierto de los Rolling Stones en cinco años también tuvo consecuencias negativas: la banda fue multada por exceder el tiempo que debía durar el show.
La municipalidad de Londres castigó al cuarteto con el pago de 200 mil libras esterlinas (más de 154 millones de pesos), porque su recital del domingo en el O2 Arena de Londres, que iniciaba una acotada gira internacional para celebrar el 50 aniversario del grupo, se extendió por media hora tras cumplir con el tiempo autorizado.
Los Stones debían finalizar su actuación en vivo a las 22:30 horas, pero se excedieron y terminaron el recital a las 23:00 horas. El recital había comenzado con un retraso de media hora, a las 20:30.
"Es una multa enorme, pero el grupo hizo lo que tenía que hacer. Por suerte no había ningún conserje parado allí, revoleando las llaves y diciendo: Es hora de irse a casa", dijo el agente del grupo, Bernard Doherty.
El recital del domingo incluyó a los ex miembros de los Stones Bill Wyman y Mick Taylor, junto a la cantante Mary J. Blige, que se sumó en el tema "Gimme Shelter", y el roquero Jeff Beck, que tocó la guitarra en el clásico de 1969 "I’m Going Down".
Wyman había tocado el bajo para los Stones de 1962 a 1992, en tanto que el guitarrista Taylor tocó con el grupo de 1969 a 1974. Esta fue la primera vez que ambos músicos se reencontraron con la banda frente al público.
Durante el recital, se proyectaron videos con mensajes de algunos de los fans más famosos de los Rolling Stones, incluidos Iggy Pop, Elton John y el músico de AC/DC Angus Young, felicitando y elogiando al grupo.
Los Rolling Stones tocarán nuevamente en el O2 Arena el próximo 29 de noviembre, antes de trasladarse a Estados Unidos, donde actuarán en el Barclays Center de Brooklyn, en Nueva York, el 8 de diciembre, y en el Prudential Center de Newark, en New Jersey, los días 13 y 15 de ese mes.