Torres estará el 22 acompañado de otro romántico de antaño: Sergio Fachelli.
SongbirdSANTIAGO.- "Sus canciones aún no tienen rostro definido", decía en 1991 Antonio Vodanovic al presentarlo en el Festival de Viña del Mar. En buena medida era cierto: Para Myriam Hernández escribió un hit como "Te pareces tanto a él", mientras que el clásico romántico "De punta a punta" logró adquirir mucha más notoriedad en la voz de José Luis Rodríguez, antes que en la propia.
Era el sino de Álvaro Torres, un cantautor salvadoreño que para entonces tenía sus versos sonando por todas partes, y que en Chile recién comenzaba a emerger con fuerza. Pero algo pasó. "Con tanto auge que llevaba mi carrera allá, la compañía disquera para la que yo grababa me descuidó bastante, puso otras prioridades antes de mí. Me fueron relegando y relegando hasta que me fui, renuncié, y desde entonces que no se da la oportunidad de volver. Es una pena, de verdad", dice hoy.
Así, desde esa ocasión en Viña que Torres no regresa a nuestro país, pero él celebra que los casi 22 años que han pasado terminarán este mismo fin de semana. "No hay plazo que no se cumpla, y este 22 de diciembre estaré ahí", remarca.
Porque ése es el día en que el salvadoreño se presentará en el Teatro Caupolicán, en una jornada que lo reunirá con otro icono del romance ochentero: Sergio Fachelli, intérprete de la emblemática "Quiéreme tal como soy".
El concierto será el primero de Torres como estelar, ya que además de su paso por Viña 91 cuenta el que realizó antes por otro festival: La OTI de 1978. Claro que entre ambas visitas, el cantante recuerda grandes diferencias: "El 91 me encontré con un Chile menos tenso, gente más relajada, más chévere, aunque siempre con esa forma esplendorosa de atender al turista".
Cualquiera podría pensar que el salvadoreño habla de política, de las diferencias entre un Chile en plena dictadura y otro que volvía a abrazar la democracia, pero fiel a su estilo aclara que la cosa no va por ahí. "No estoy muy al tanto, yo soy totalmente apolítico. Mi partido es el amor, los sentimientos, las emociones, esas historias tan intensas y profundas que canto y escribo", dice apegado al manual del buen romántico.
De todos modos, recalca: "El hecho es que encontré un pueblo más suelto, más alegre, y yo lo sentí, lo palpé y lo disfruté".
Para el sábado 22, en tanto, Torres cuenta que "me encantaría presentar a mis hijos más jóvenes, pero me dedicaré a cantar los clásicos, porque entiendo que mi discografía se detuvo quizás hace 21 años, en 'Mi verdadero amor', 'Si estuvieras conmigo', 'De punta a punta', en fin... Ésos son los temas que desfilarán, y si hay ambiente presentaré algunas cosas más recientes".