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Metal

En sólo cuatro temas, el ex bajista de Metallica ofrece una muestra de su capacidad para configurar piezas bien ancladas en lo que se espera del género, y más cercanas a su trabajo en Voivod que a lo hecho con el popular grupo que lo lanzó a la fama.

10 de Febrero de 2013 | 09:53 |
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Las cosas como fueron: en Metallica, Jason Newsted siempre fue el reemplazante de Cliff Burton. La figura del malogrado bajista, quien falleció en un accidente durante la gira de Metallica por Europa en 1986, se transformó en un símbolo aún cuando Newsted participara con Hetfield y compañía desde ...And justice for all (1988) hasta el doble S&M (1999). Más de una década en la que debió luchar, no siempre de la forma más justa, contra la memoria de Burton y el significado de éste tanto para el círculo interno de Metallica (es sabido que Newsted siempre fue el blanco de la mayoría de las bromas en la banda) como para los seguidores más antiguos del grupo.

Cuando el bajista decide dejar a los de San Francisco, nadie pensó que recalaría en los canadienses Voivod, metaleros de culto con su mezcla de líricas post-apocalipsis y riffs sabbáticos y cortantes. Junto al vocalista Denis "Snake" Belanger y, sobre todo, el guitarrista Denis "Piggy" D'Amour, el bajista no sólo participó en la edición de dos excelentes discos: Voivod (2003) y Katorz (2006). También pudo ser protagonista en la producción y toma de decisiones dentro de esa agrupación, sobre todo después de que D'Amour falleciera en 2005 debido a complicaciones de un cáncer al colon, lo que llevó a Newsted a liderar la banda en la edición del mencionado Katorz y en Infini (2009), último registro con los canadienses.

De esta forma es que toda la experiencia de Newsted construye la base de Metal, un epé de cuatro temas que siguen mucho más lo realizado con Voivod que su propia participación en Metallica. Los riffs de guitarra son precisos, aunque a nivel de letras, el bajista suene algo inocentón. Como sea, el thrash de la vieja escuela de "Soldierhead" o el salto hacia los sonidos sabbáticos con "Godsnake" dan cuenta de que al ex Metallica sólo le importó crear un buen puñado de canciones, que sean además reflejo de sus propias inquietudes. Así, aparecen los temas más "experimentales", como "King of the underdogs", con claras reminiscencias a Voivod, y la canción que cierra este epé, "Skyscraper", que incluso se adentra en terrenos más stoner, en ciertos parajes. Vale decir, una buena muestra de lo que podría acabar siendo el primer elepé de Newsted: mucho más crudo y directo, en la línea de lo que venía haciendo en los últimos años.

Sin dudas, Metal es una sorpresa grata. Representa las ambiciones de un músico que no deja que su pasado lo consuma, lo que siempre es una buena noticia. Y lo mejor, es que lo acompaña de cuatro temas bien elaborados, que si bien no constituyen en sí un elemento novedoso en el género (ya el nombre de este registro es, por decir lo menos, flojo), muestran a un Newsted con ganas de demostrar su propia voz, al menos musicalmente.

Felipe Kraljevich M.

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