SANTIAGO.- Cuando los estudios Paramount anunciaron hace casi un año que postergaban en nueve meses el estreno de "G.I Joe: el contraataque", se escudaron en razones técnicas: era mejor esperar y lanzar la película en formato 3D. ¿La excusa?: Siempre las escenas de acción- precisamente el punto fuerte de esta película- se pueden disfrutar más cuando se utiliza la última tecnología.
Esta semana, tras un laborioso trabajo de post-producción que el director Jon M. Chu jamás tuvo previsto durante el rodaje en 2D, la película finalmente tendrá su debut mundial con la presencia de Bruce Willis en el reparto.
La sucesora de "El origen de Cobra" retoma las actividades de su villano (Luke Bracey) y muestra el conflicto que instala en la Casa Blanca cuando logra que su aliado, Zartan (Arnold Vosloo), se haga pasar por el presidente del país para controlar las armas nucleares a nivel mundial.
Obviamente la presencia del comando especial obstaculiza los planes de Cobra, por lo que el director – quien también es el responsable del documental de Justin Bieber, "Never Say Never"- no pierde minutos de metraje en exponer la primera batalla que intenta dar por muertos a los G.I Joe.
La cacería de la unidad militar es justificada por el supuesto crimen cometido por Snake Eyes (Ray Park) en contra del presidente de Pakistán. En este plan es fundamental la ayuda de Storm Shadow (Byung-hun Lee), quien una vez más hace gala de su tendencia a los cambios de bandos.
Aunque la película cuenta con la aparición de Channing Tatum como el sargento Duke, el liderazgo es asumido ahora por Dwayne Johnson en la piel de Roadblock, junto a la atractiva Lady Jaye (Adrianne Palicki) y Flint (D.J. Cotrona). Aunque la película no incluye grandes enredos amorosos, sí se hace un guiño al romance que estos dos últimos personajes mantienen en la historieta.
Al equipo se suma Willis como el general Joe Colton, quien ejecuta un rol fundamental en la batalla contra Cobra. Eso sí, su aporte es más moral que físico.
La producción repite la probada fórmula de las películas del género: explosiones, ojivas nucleares, balas y músculos, por lo que mantiene la línea de su antecesora. A las salas nacionales llegará el próximo jueves, un día antes de su estreno en Estados Unidos.