La española se despedirá de Chile en Santiago, Concepción y Viña del Mar.
Producción Paloma San BasilioSANTIAGO.- "Es empezar por donde empecé", dice Paloma San Basilio de cara a su gira de despedida de los escenarios, y al inicio fijado para el próximo jueves 2 de mayo. El lugar escogido es uno especialmente simbólico para la española, ya que fue el primero que le abrió las puertas en los inicios de esta carrera que ahora concluye: Chile.
El Teatro Nescafé de las Artes será el primer sitio que verá a la artista decir "Hasta siempre", título con que decidió bautizar a un tour que, aclara, no es para decir adiós, sino para agradecer.
"Es una gira de agradecimiento. Y Chile es parte importante de mi carrera, fue el primer país que me llamó, que me abrió sus puertas, me dio un sitio, y eso es algo que nunca olvidaré. Por eso, a la hora de plantearnos la gira, me parecía lo más lógico empezar allí", cuenta la intérprete de éxitos como "Por qué me abandonaste" y "Juntos".
Esa apertura de puertas se remonta a fines de los 70, cuando su carrera comenzaba y ella firmaba por una compañía de discos en la que uno de los ejecutivos era Raúl Matas. El insigne comunicador local de inmediato apostó por ella, y aprovechando su trabajo en la televisión chilena de inmediato la invitó al país.
"A partir de ahí empecé a ir con una cierta frecuencia, hasta el Festival de Viña del Mar, donde fui jurado por ahí por el 79. Allí canté mi primer éxito en Chile 'Beso a beso dulcemente' ", recuerda la española.
La Quinta Vergara, precisamente, es cuna de los recuerdos más emotivos de la española, pero también de otros más tensos y polémicos: "Recuerdo mi primer Viña del Mar, mi primera Antorcha de Plata, que fue muy emocionante. Hay un momento especialmente emotivo, una vez que fui y quise cantar 'Volver a los 17'. Me sugirieron que no la cantara, pero yo dije que si no la cantaba, no hacía el show".
La sugerencia vino de parte de quienes estaban a cargo de la transmisión y de TVN ese año 1986, pero San Basilio optó por no hacer caso. "Y fue precioso, porque cuando la canté la Quinta Vergara era un clamor cantando conmigo. Yo no sabía que lo que hacía con mi voz podía ser tan emocionante y tan bonito, no se me olvidará nunca. Fue un acto de comunión con la gente", cuenta.
Ese recuerdo, seguro, estará en los conciertos que la española ofrecerá el 2 y 3 de mayo en el recinto de Manuel Montt, el 4 en Concepción y el 5 en el Casino Enjoy de Viña del Mar. Porque su actual gira no sólo se ancla en canciones, sino también en anécdotas y vivencias compartidas con la gente.
"Hay un guión escrito, en el que cantantes-actores van a interactuar conmigo, con pequeños diálogos, en los que vamos a contar un poco cosas que la gente no sabe, cómo fue todo en un momento determinado. Vamos a tratar de hacerlo divertido, ameno, e intentando que esté representada cada etapa de mi discografía. Son pequeñas anécdotas de mi vida profesional, de una trayectoria de casi 40 años", explica.
-¿En qué minuto toma la decisión de no seguir cantando?
-No es un minuto, es una sensación natural que va creciendo dentro de ti, y que te va marcando las etapas. No es una decisión traumática, es algo que vas notando que está, y que crees que es sano aceptarlo en un momento en que cantar y estar en un escenario todavía sigue siendo algo maravilloso para ti. No es que sientas cansancio o vacío, sino que si atendemos un poco a nuestra inteligencia emocional, vemos que ésta también nos va marcando pautas.
-¿Y ahora? ¿Se dedicará cien por ciento a la pintura?
-Cien por ciento no me voy a dedicar a nada. La etapa del cien por cien ya pasó para mí. Voy a pintar, a escribir mis artículos, viajar. No voy a ocupar espacios, porque quiero que la vida me sorprenda. Que esta etapa me proponga cosas nuevas y me estimule en alguna dirección.
-Imagino que la pintura es algo que simplemente la apasiona, porque el mercado del arte en España se sabe que no anda bien...
-No estoy pintando por dinero, sino porque me gusta. La pintura lógicamente va muy asociada a mí, entonces ha pasado que ha habido mucho interés, pero también porque es una pintura muy energética, con mucho color y luz. La gente que lleva tantos años siguiendo mi trayectoria quiere tener un cuadro mío en su casa, pero es algo muy puntual, que no tiene que ver con el mercado del arte, que no está muy bien ahora mismo. Bueno, como todo el país.
-¿Cómo ve a España hoy? Acá nos llegan las noticias de la crisis...
-Ahora mismo es víctima de un modelo económico y social equivocado, que nadie ha sabido corregir, y estamos sufriendo algo que para mí es inviable, que es la incorporación al euro de países que no tienen una economía competitiva, que tienen un nivel económico y salarial por debajo de los que sí han salido beneficiados con el euro. Es culpa de la ambición desmedida, del espejismo del tema comunitario, en que te hacían pensar que éramos todos iguales, y realmente no somos todos iguales. El que no acepte esa diferencia, y no trabaje en las direcciones distintas en que los países tienen que trabajar, le está haciendo un flaco favor a la comunidad. Y como siempre, los que más sufren son los más débiles. Es lamentable lo que está pasando, porque está muy claro que no existe la cohesión europea, no existe el equilibrio monetario europeo. Hay una manera de hacer las cosas que favorece a unos y hace daño a otros.