La canción francesa está de duelo: Georges Moustaki muere a los 79 años

PARIS.- El destacado cantautor francés de origen griego Georges Moustaki falleció en Niza, en la costa mediterránea de Francia, a los 79 años de edad, y tras un tiempo alejado de los escenarios, a causa de la enfermedad pulmonar que lo aquejaba.

El cantante, nacido en Alejandría y autor de temas como "Milord" o de "La Métèque", se había despedido de los escenarios con un último concierto en el Palacio de la Música de Barcelona, en España, en enero de 2009.

"He tenido una vida apasionante. Espero que lo sea hasta el final", dijo en 2011 el cantante, cuando explicó a la prensa que tenía una enfermedad pulmonar incurable que le hacía "definitivamente incapaz de cantar", y ya anticipando que el tiempo que transcurría correspondía ya a sus últimos años de vida.

Contemporáneo de una generación de artistas que dieron a conocer la chanson française, como su maestro Georges Brassens, además de Jacques Brel o Serge Gainsbourg, Moustaki compuso piezas que luego interpretaron ilustres como Edith Piaf —quien fuera su amante—, Yves Montand, Barbara o Serge Reggiani.

Nacido con el nombre de Joseph Mustacchi en 1934, el seductor poeta y músico se hizo mundialmente conocido a finales de los años sesenta y principios de los setenta con temas como "Milord", que hizo célebre la garganta de Edith Piaf. "Le facteur", "La mer m'a donné", "Ma solitude" o "Le temps de vivre", fueron otros de los éxitos que impuso, y que hasta hoy continúan sonando en las voces de nuevos cantantes.

Con su partida queda por siempre su imagen icónica y representativa de su tipología de artista: Barbudo, libérrimo, incansable viajero a lomos de motocicleta, amante de las mujeres, de la literatura y de la vida.

Su padre, el librero Nassim, hablaba cinco idiomas. Su madre, Sarah, seis. Así, no sería raro que él mismo cantara en diversos idiomas, tal como ocurrió con "La Métèque", un clásico que aquí se hizo célebre en lengua francesa, pero que también sonó en castellano como "El extranjero", en su propia voz.

El impulso definitivo a su carrera lo dio en 1951, cuando con 17 años se mudó a París, donde partió ganándose la vida con trabajos como vendedor de libros puerta a puerta, o periodista ocasional. Pero allí conoció también a Georges Brassens, quien lo animó a escribir versos y lanzarse a cantar. En sus inicios cantó entre las mesas de los restaurantes y se desempeñó también como pianista de cabaret.

En 1958 conoció a Edith Piaf, para quien escribió "Eden blues", "Les orgues de barbarie" o "Le gitan et la fille". Pero la canción que se recuerda de aquella relación musical y sentimental es "Milord", texto que Moustaki creó a los 25 años.

Dos años más tarde emprendió su carrera discográfica, mientras seguía escribiendo para otros artistas y viviendo, esencialmente, de los derechos de autor.

Pero "Le Métèque" dio vuelta todo. Aquel autorretrato musical cambió su vida y le abrió las puertas de lugares como Japón, Estados Unidos, México, Canadá y Brasil. Este último, un país del que verdaderamente se enamoró, y donde trabó amistad con el escritor Jorge Amado y con músicos como Elis Regina, Chico Buarque, Gilberto Gil y Vinicius de Moraes.

En febrero pasado, asistido con respiración artificial, Moustaki concedió su última entrevista al diario "Nice Matin": "He dado la vuelta al mundo y a los escenarios, grandes y pequeños. He vivido cosas magníficas. He aprendido que lo que creemos adquirir es solo una pequeña e ínfima parte de lo que nos queda por descubrir (...). Ahora quiero escribir, pintar. Consagrar mi tiempo a lo que me da placer, como siempre he hecho".