"Vamos a seguir celebrando hasta los 51"

Van a ser cincuenta años exactos, por calendario. Y casi por reloj. En la tarde de este jueves 15 de agosto en Santiago, Los Jaivas subirán a escena justo a medio siglo de ese 15 de agosto de 1963 que está registrado en su historia como la primera ocasión en que los integrantes del grupo estuvieron juntos tocando sobre un escenario.

Esa vez fue en el proscenio del Teatro Municipal de Viña del Mar, balneario natal del grupo, en una actuación con motivo del aniversario del Liceo Guillermo Rivera, donde los jóvenes músicos estudiaban. Cinco décadas más tarde, en esta oportunidad será en un escenario frente al Museo Nacional de Bellas Artes en Santiago, donde Los Jaivas actuarán como atracción de fondo en un festival de larga duración, al aire libre y con entrada gratuita (ver recuadro al final), con motivo del quincuagésimo aniversario del popular grupo musical chileno.

La elección del lugar no es casual. El Museo Nacional de Bellas Artes acoge durante todo este mes a la agrupación, como sede de la exposición "Los Jaivas medio siglo", en conjunto con la exhibición "Cinco décadas de rock chileno", organizadas por la Corporación del Rock y el Cómic, la Fundación Cultural Los Jaivas y el Museo. Es una completa muestra de fotografías, discos, instrumentos, archivos periodísticos y bibliográficos, instalaciones multimedia y las carátulas que el artista René Olivares ha creado para los discos del grupo, entre otros ítemes.

Y son muchas más las actividades de conmemoración del aniversario. Está prevista hasta fin de año la publicación de cinco libros alusivos al cincuentenario, de los cuales ya han sido lanzados el poemario "Santiago", de Eduardo Parra, tecladista y uno de los fundadores del grupo; "Los Jaivas. 50 años de historia", de la periodista Pamela Urbina Alvial; y "Cancionero ilustrado por René Olivares", con ilustraciones del citado artista visual y publicado en conjunto con la Fundación Gabriel y Mary Mustakis.

El grupo lanzó además este año su DVD recopilatorio Obras cumbres y, como parte de una agenda de conciertos que ya los tuvo en el Teatro Municipal de Santiago, tocarán este jueves 15 en el Museo y el 19 de septiembre en la Quinta Vergara de su ciudad natal, entre varias otras fechas próximas en las que se presentarán con su actual alineación, integrada por Mario Mutis (voz, bajo y guitarra), Claudio Parra (piano), Juanita Parra (batería), Carlos Cabezas González (voz, charango, violín y vientos), Francisco Bosco (saxo y flauta) y el reciente Alan Reale (guitarra), incorporado en 2013.

"Queríamos hacer muchas actividades durante todo el año 2013 y parte del 2014. Invitar a participar a todo el mundo, ojalá a todos los chilenos, y la verdad es que esto ha superado todas nuestras expectativas", dice Mario Mutis junto a Juanita Parra, minutos después del lanzamiento de "Cancionero ilustrado" y con la exposición del Museo como telón de fondo. "Si tú vienes cualquier día, de semana o de fin de semana, es una locura de gente la que ha venido. El domingo pasado había más de cinco mil personas en este lugar. Una maravilla".

"Por lo menos en lo que se refiere a la exposición, llegó un momento en que ya no sentí que estaba preocupada de si habíamos puesto las cosas suficientes, si estaba todo bien, sino que sentí que habíamos traído al Museo a gente que no había entrado antes —agrega Juanita—. Que trajimos la música al Museo, y ver cómo la gente responde, me llenó de orgullo. La gente respondió y finalmente de eso se trata, de que logremos comunicarnos con nuestro público".

-¿Hasta cuándo hay celebración de los cincuenta años?
-Hasta que cumplamos cincuenta y uno —dice Mutis—. La única diferencia con la gente común y corriente es que vamos a seguir celebrando hasta que cumplamos los cincuenta y uno. Y están todos invitados.

Una batería y tres generaciones

"Empezamos a hablar de los cincuenta por ahí cuando teníamos como cuarenta y cinco, cuarenta y seis", recuerda el bajista a propósito de los inicios de la celebración. "Y fueron acumulándose y anotándose ideas, proyectos y cosas. Porque no es fácil juntar todos los elementos que ustedes pueden ver en la exposición, la batería de Gabriel (Parra, integrante fundador del grupo, fallecido en 1988 y padre de Juanita Parra), los cuadros de René (Olivares), todo el material fotográfico, discográfico, los premios".

"Tenemos la suerte de que en este grupo a lo largo de los años cada uno va tomando un rol, una responsabilidad casi naturalmente —agrega Juanita—. Entonces Claudio (Parra) fue guardando todo, las primeras cosas, en una época en la que no me me imagino que ellos estuvieran visualizando todo esto que iba a venir. Pero Claudio ya iba atesorando. Y finalmente cuando llegan los cincuenta años tú dices 'bueno, abramos los baúles y saquemos todas estas cosas que están'. Y es increíble que estén".

Un ejemplo es la monumental batería original de Gabriel Parra, que es parte de la exposición. "Es increíble que hayamos logrado tener diez de los doce toms (tambores) de la batería de Gabriel", dice su hija. "O sea, sólo faltan dos, que son los más chiquitos. Finalmente los logramos conseguir y te das cuenta de que la gente se emociona al ver la batería, les trae tantos recuerdos. Bueno: en mi caso también, llegué a sentir vértigo cuando la armamos un día domingo en la sala de ensayo, antes de traerla para acá. Me senté detrás de la batería y me dio vértigo. No sólo por la historia, por el amor, sino porque son unos tambores tan grandes que uno dice 'ah, ¿cómo hago para tocar esto?'. Entonces como que los miro y me mareo".

-Aparte, te sentabas en esa batería desde chica...
Juanita Parra: Sí, desde chica.
Mario Mutis: Además de que esa batería está sonando como nunca. Tiene un sonido reamente espectacular.
Juanita Parra: Sí. Ahí se nota la calidad.

-¿Está la posibilidad de escuchar esa batería en vivo?
Mario Mutis: Sí, por supuesto. Aquí adentro la hemos tocado.
Juanita Parra: Anoche vinimos a ensayar e invitamos a Juan Pablo Bosco (percusionista y hermano de Francisco Bosco), que es quien está haciendo las partituras para batería. Él estaba esperando su turno, porque lo invitamos a tocar un tema al concierto, y me dice "¿Me das permiso para ir a tocar la batería arriba?". "Sí", le dije yo. Y se escuchaba como una masa, Juan Pablo pero embalado tocando la batería. Mi hija también ha venido muchos días al Museo a tocar la batería, y ella, con toda la soltura de un niño pequeño, se lanza y lo hace feliz. Pero a mí me provoca una impresión especial.

La historia: Ahí estamos, en ese camino

Eduardo Gato Alquinta, Mario Mutis y los hermanos Claudio, Eduardo y Gabriel Parra son la formación histórica de Los Jaivas, que data del comienzo de un recorrido registrado en una veintena de discos y recopilaciones, publicadas entre 1971 y el citado y reciente DVD Obras cumbres, de este año. Y el primer paso de la historia es esa actuación de 1963, que da origen al cumpleaños del grupo.

-¿Qué imagen se viene a la cabeza de Mario, si es por recordar esa actuación de hace cincuenta años, el 15 de agosto del 63?
Mario Mutis: Bueno, una imagen bastante desastrosa, en realidad (se ríe). Porque, claro, era el aniversario del colegio, nos juntamos los cinco Jaivas originales, digamos, que después hicimos los High Bass en un escenario como el Teatro Municipal de Viña. Por primera vez nos subimos a un escenario juntos. Pero no estábamos solos, eran veinte o treinta niños más, era el acto del colegio, entonces había un montón de chiquillos tocando arriba. Y la verdad es que no fue muy...
Juanita Parra: Parece que les tiraban hasta monedas, ¿o no?
Mario Mutis: Monedas, tomates, lo que pillaron, porque habíamos aprendido un tema, que era "Sueña", del Luis Dimas, y ese tema cantamos ahí. Es decir, cantó un cantante. Nosotros lo acompañábamos, eran veinticuatro guitarras de palo y dos guitarras eléctricas.
Juanita Parra: Y una batería.
Mario Mutis: Y una batería que tocó el Gabriel y no la soltó nunca más. Y la verdad que el cantante entró como dos tonos más abajo y era un desastre, y las guitarras se cruzaban porque no nos escuchábamos, no había monitores, en ese tiempo no había ninguna infraestructura técnica. Entonces al final salimos casi a escupitajos del escenario.
Juanita Parra: Les prometemos que el próximo jueves no va a ser así (se ríe). Hemos ensayado cincuenta años para superarlo.

-¿Qué tienen pensado para ese día?
Mario Mutis: Tenemos grupos invitados, amigos nuestros históricos, grupos importantes de Chile que van a estar ahí. No van a estar todos los que hubiéramos querido, porque no tenemos el tiempo suficiente. Los grupos van a hacer uno, dos o máximo tres temas en el escenario, van a pasar muy rápido y nos van a dejar como una hora para hacer el concierto de cierre. Entonces pedimos disculpas por no haberlos invitado a todos, que era nuestra intención, que vinieran miles, que estuviéramos ojalá cincuenta y tres horas, como Los Jockers (el sesentero grupo de rock chileno que dio un concierto maratónico en 1967).

-Batiendo el récord mundial...
Mario Mutis: Batiendo el récord mundial con los cincuenta años, pero no fue posible.

-A propósito de aniversario, hace diez años Los Jaivas celebraron sus cuarenta años entre otras cosas con la serie de discos La vorágine, que corresponde a una etapa muy especial del grupo, a fines de los 60. ¿Qué representa ese período para ustedes dos?
Juanita Parra: Yo he disfrutado escuchando esa compilación porque representa la época más salvaje. La encuentro genial, el Gato gritando, obviamente como joven es lo más motivante que hay, y es increíble también ver el proceso de cómo de esa locura llegaron en algún momento y pum, empezaron a aparecer las canciones. Qué bonito que jugaron a descubrir la música nuevamente, a usar los instrumentos de manera extraña. Creo que finalmente gracias a esa esencia se logró todo lo demás.

-¿Cómo fue para Mario estar metido en esa vorágine?
Mario Mutis: La vorágine es la grabación de los conciertos que hacíamos entre el 68 y 69 hasta el 70, el 71. Digamos que es la época de improvisación e investigación. Y si uno escucha esa colección de cinco discos se va a encontrar con que ahí están los elementos, el lenguaje musical básico de Los Jaivas. Hay cosas que se descubrieron en los conciertos, en la experimentación, lenguajes musicales que hasta hoy siguen vigentes y se siguen ocupando, en las composiciones más modernas y las canciones más estructuradas.

-¿De qué manera marca a Los Jaivas la estadía tanto en Argentina, entre 1973 y 1977, como en Francia, a partir de 1977 y hasta los 80?
Mario Mutis: Yo siempre comparo que Chile es como la preparatoria, cuando uno va al colegio: la básica. Argentina ya fue la secundaria, porque Argentina estaba muchos peldaños sobre nosotros: tenían infraestructura, periodismo especializado, estudios de grabación maravillosos. Eso no existía en Chile en los años 70. Y después viene la época universitaria, comparándola con la estadía en Francia, codeándose con los grupos más grandes del mundo, compitiendo con ellos en cartelera. Fue una experiencia importante.

-Aparte, los de Argentina son los años de nina niña de Juanita.
Juanita Parra: Niña, niña, niña.
Mario Mutis: Antes de los tres años llegó allá.
Juanita Parra: Sipo, tenía dos años y medio cuando nos fuimos a Argentina (la baterista nació en 1970). Pero ahí comienza la vida en comunidad. A partir de esa gira de dos semanas, que terminó siendo una historia de años, comenzamos a vivir juntos. Entonces fue muy bonito, porque empecé desde ahí a compartir con mis primos, como hermanos, a despertarnos y acostarnos con la música. Porque la comunidad el único motivo que tenía es que Los Jaivas, los cinco músicos, vivieran juntos y pudieran crear a toda hora, por lo tanto vivíamos sumergidos en la música. Desde el embarazo, en realidad, mi mamá dice que ella iba a los conciertos y yo me movía, respondiendo a la música.
Mario Mutis: ¡Está pateando, está pateando! En el solo de batería.

-Ya estabas tocando el bombo...
Juanita Parra: Desde el vientre de mi mamá ya estaba agarrada y conectada con el bombo. Y bueno, después llegamos a Francia, entramos al colegio, empezamos a hablar francés, y yo durante muchos años creí que el mundo era así: Que los papás eran músicos, que las mamás estaban en la casa tejiendo chalecos, que los niños crecían así. Y de repente me cayó la teja.
Mario Mutis: O sea: una burbuja.
Juanita Parra: Vivíamos en una burbuja, definitivamente, tanto que los niños creíamos que todo el mundo era así. Para mí fue un mundo de felicidad, lo que me dio una base para la vida. Ahí entendí la esencia de Los Jaivas, la verdad, y para muchos de los que vivimos en la familia creo que también fue así.

-¿Es posible elegir un disco que les guste de modo personal en la historia de Los Jaivas?
Juanita Parra: Ahh... (suspira).
Mario Mutis: Es como si yo te preguntara a cuál hijo quieres más. Claro, es muy difícil, porque todos tienen su contexto, su historia, su momento, su inspiración, su ejecución. Son épocas distintas. No es lo mismo grabar un disco a los veintidós que a los cincuenta. Es distinta la visión del mundo que tienes y es distinto el momento histórico en el cual estás viviendo.

-Por ejemplo, Hijos de la Tierra, del 95, ¿tiene una importancia especial para Juanita, porque sea el primer disco en el que aparece formalmente integrada al grupo?
-Claro, tiene importancia porque es el primer disco en el cual participo. Pero la verdad es que el disco que siento muy fuerte en mí es Arrebol (2001, el último disco de Los Jaivas antes de la muerte de Gato Alquinta, ocurrida en enero de 2003). Porque en Arrebol logré sentir que había captado y entendido el código de la improvisación que daba lugar a la creación. Sentí por primera vez que entendía, que podía aportar, estaba mucho más opinante. El taller con Gato y con Claudio, que muchas veces estábamos los tres, estaba logrando algo y dije "qué genial, de ahora en adelante ya entendí, qué rico, ahora viene. Ahora sí que sí".
Mario Mutis: Aprendió a hablar Jaiva.
Juanita Parra: Claro, aprendí a hablar Jaiva, pero se murió el Gato a los pocos meses.

-Pero entonces te dejó el idioma...
Juanita Parra: Me dejó el idioma. Pero obviamente quedé con esa sensación. Por eso el disco Arrebol después de mucho tiempo lo vuelvo a escuchar y hay unos temas súper locos, que hablan de un nuevo lenguaje Jaiva también. El tema "Chile", que es fuerte, unos temas medios rapeados de Gato, yo sentí que venía como un camino nuevo. Bueno: ahí estamos. En ese camino.

-¿De qué modo siguen presentes Gabriel Parra y Gato Alquinta en el escenario y en la vida del grupo?
Mario Mutis: Bueno, ellos están presentes siempre. Porque resulta que lo que nosotros hacemos en el escenario es el resultado de la creación de ellos también. El lenguaje lo creamos juntos. Eso nos pasa en el escenario: cuando la Juanita hace un corte en la batería, sin necesidad de pensarlo sé que eso lo hizo el Gabriel, y la Juanita lo está interpretando en ese momento. O cuando el Alan (Reale, nuevo guitarrista) hace un solo de guitarra, yo estoy viendo al Gato cuando lo hace. En este momento somos intérpretes de Los Jaivas.

-¿Es una forma de decir que no han muerto?
Juanita Parra: Están. Están con nosotros. Obviamente no los vemos...
Mario Mutis: Pero los sentimos...
Juanita Parra: A veces hasta los sentimos. A mí me pasó en el último concierto, en Codpa, una cosa increíble: Sentí que estaba... O sea, de hecho, me hicieron así en el concierto (hace una caricia por detrás de la cabeza). Tocando. O sea, yo no lo pude creer.
Mario Mutis: "Deja de molestar, papá".
Juanita Parra: Además que él me rascaba la cabeza en la noche para yo dormirme. Entonces fue impactante. Además después de tanto tiempo. Es que Codpa es un lugar en Arica, un valle, profundo, en la Quebrada de Camarones, con una fiesta increíble, donde llegamos a tocar con Los Jaivas por primera vez este año. Fue un lugar tan mágico que logró hasta llegar Gabriel.