''Slave Labour'', obra que creó Bansky el año pasado.
El Mercurio.LONDRES.- La subasta de grafitis de Banksy, considerado el artista callejero más popular del mundo, suscitó en los últimos meses la indignación de los habitantes de los barrios londinenses expoliados, e hizo de la venta de su arte callejero un negocio lucrativo.
Este británico originario de Bristol, cuyo verdadero nombre sería Robin Gunningham, diseña grafitis con 'stencil en los que mezcla humor e irreverencia, militancia y poesía.
Entre sus obras más conocidas se encuentran la de una niña pequeña con globos en la mano que emprende el vuelo, o la de un manifestante lanzando un ramo de flores en lugar de una piedra, ambos pintados en el muro de separación israelí.
Sincura Group, una empresa de lujo que se vanagloria "de obtener lo inaccesible", subastó el pasado mes de junio por un valor de 750 mil libras una obra de Banksy, que había sido discretamente extraída de un muro londinense.
En 2012 en el muro de un barrio popular del norte de Londres, Banksy grafiteó esta obra, "Slave Labour" ("Trabajo de esclavo"), que representa un niño de rodillas mientras cose a máquina pequeñas banderas británicas, para denunciar el trabajo infantil.
A finales de julio, el grafiti "No Ball Games" desapareció de Tottenham, un popular barrio vecino del anterior y teatro de las revueltas de 2011. Según Sincura Group, esta obra, que representa dos niños jugando a lanzarse un panel de prohibido jugar a la pelota, será "renovada" antes de ser vendida en 2014.
La subasta de una tercera obra está prevista el 5 de diciembre en Beverly Hills.
Para Richard Howard-Griffin, director de Street Art London, que organiza visitas guiadas en Londres para descubrir el arte callejero, estas subastas son "el capitalismo puro que ilustra la codicia inherente a la naturaleza humana. Completamente legales, pero un fracaso moral".
Los beneficios de la venta no revierten en el artista, sino en el propietario del muro donde se encuentra el grafiti.
Banksy, quien guarda con celo su identidad, ha dicho sobre este punto que "estas célebres casas de subastas se han puesto de repente a vender el arte callejero. Todo se vuelve un poco loco, de golpe, todo gira alrededor del dinero cuando nunca fue una historia de grandes sumas de dinero".
En su página web, donde invita a cada uno a descargar gratuitamente las fotos de sus grafitis, el artista cita a Henri Matisse para evocar su sentimiento frente a estas ventas de 6 cifras: "desde entonces, me sentí condenado a pintar únicamente obras maestras".