Anna Netrebko y Mariusz Kwiecien en una escena del montaje expuesto anoche.
Lee BroomfieldNUEVA YORK.- La nueva temporada de la Metropolitan Opera House de Nueva York comenzó el lunes en la noche con un tinte ruso, gracias al montaje de "Eugene Onegin", de Tchaikovski, y con la presencia de la diva lírica Anna Netrebko, pero defendiéndose de las acusaciones de no castigar la política homófoba de Vladimir Putin.
Las acusaciones de homofobia para una institución con una amplia audiencia homosexual han perseguido este estreno que, antes de cualquier aria, estuvo protagonizado por las protestas de los activistas, a los que el Met decidió contestar a través del éxtasis artístico.
Con la pantalla preparada en el exterior del Lincoln Center para compartir la experiencia con los ciudadanos y con una ceremonia en el interior plagada de glamour, este estreno reconoció el derecho a la protesta pero reivindicó abstención política.
El lobby homosexual había solicitado que dedicaran este estreno a la lucha contra la política de vulneración de los derechos de la comunidad LGBT y había cargado contra la diva lírica Anna Netrebko y el director Valery Gergiev por haber mostrado su apoyo a Putin, pero desde el Met se mantuvieron inamovibles.
"Es importante que el público entienda por qué no dedicamos esta representación a los ciudadanos gays oprimidos de Rusia, incluso habiendo sido presionados para ellos (...) Como institución artística, el Met no es el vehículo apropiado para luchar batallas contra las injusticias sociales del mundo", aseguró el director general de la institución, Peter Gelb.
En un comunicado enviado a la agencia de noticias Bloomberg y que ha entregado con el programa de mano del estreno, Gelb insistía que no tenía que demostrar su apoyo a la comunidad homosexual en "una plantilla de empleados y una nómina de artistas con la que el Met ha estado por delante en la lucha por la igualdad social y sexual".
"Mientras Rusia oficialmente puede negar la sexualidad de Tchaikovsky, nosotros no lo hacemos. Estamos orgullosos de presentar al compositor gay más grande de Rusia", continúa el comunicado y, no en vano, "Eugene Onegin" fue compuesta a finales del siglo XIX, en las postrimerías del fugaz matrimonio del ruso, y es reflejo de la asunción de su verdadera sexualidad.
También asegura el documento que "en la 129 distinguidos años de historia, el Met nunca ha dedicado una sola representación a una causa social o política, no importa lo importante o justa que fuera. Nuestros mensajes siempre han sido enviados a través del arte".
En cualquier caso Netrebko, que en Facebook había escrito que "nunca he discriminado ni discriminaré a nadie", salió al escenario y se llevó una ovación, en la que supone su tercera inauguración consecutiva de la temporada de ópera de Nueva York.
Tras esta ópera (que cambiará su reparto avanzada la temporada y contará con el peruano Rolando Villazón), la ópera de Nueva York ha programado otros clásicos como "Così fan tutee", de Mozart con la dirección musical de James Levine; "La nariz", de Shostakovich, según un innovador montaje de MWilliam Kentridge y de nuevo con Gergiev, y "Norma"; de Bellini, con las voces de Sondra Radvanovsky y Angela Meade.