Ben Stiller se encuentra en México presentando su última cinta como actor y director.
AP
MÉXICO.- El actor estadounidense Ben Stiller lamentó hoy la tendencia a la digitalización en el cine y reivindicó el uso del celuloide en la industria, argumentando que "es triste que ya no hay nada físico, que lo real se está acabando".
Stiller realizó estas declaraciones durante una rueda de prensa en esta capital, donde llegó para promocionar su más reciente cinta, "La vida secreta de Walter Mitty", que él mismo dirige y protagoniza.
El actor añadió que la acelerada revolución de los medios digitales está cambiando el estilo de vida de las personas, incluyendo al cine , donde se vive "un mundo más despersonalizado y electrónico".
"Para mí es una tristeza que todas las grandes cosas que se están haciendo ahora es en términos de accesibilidad y categorización en un mundo digital", declaró el artista, quien lamentó que la digitalización haya reemplazado a las películas de celuloide en 35 milímetros y se pronunció por regresar a ellas, como ha hecho con este nuevo trabajo.
"Sentía que era importante hacer la película con celuloide porque creo que es triste que esté desapareciendo", confesó Stiller, y agregó que además la historia lo "permitía" por tratarse de una historia "que tiene un toque humano".
El también director no se atrevió a definir esta cinta, aunque tiene claro que "comedia no es" y "tiene un poco de muchos géneros. Lo único que sí sé es que mi actuación es distinta a lo que han visto de mí".
La película cuenta la historia del joven Walter Mitty, editor en una conocida revista, que tiene días monótonos y aburridos hasta que la "gran imaginación que posee se traslada continuamente a mundos divertidos y alejados de la realidad mundana".
Un día cualquiera sus sueños fantasiosos se convierten en realidad y el editor pasa a encarnar a un súper héroe a quien le encargan la misión de recuperar las joyas de la Corona neerlandesa.
Luego de su exitoso debut en la dirección con filmes como "Reality bites" y "Zoolander" y de haber recibido buenas críticas por dirigir también "Tropic Thunder", el cineasta, de 47 años, aseguró sentirse realizado en lo personal y profesional.
"Siempre me he visto como un director, esto es lo que siempre he querido hacer desde que era pequeño", afirmó, añadiendo que "me enfoqué mucho en mi carrera antes de tener una familia y ahora que la tengo, ese enfoque, esa base, es muy importante porque me permite darle seguridad a ellos y estoy agradecido que al mismo tiempo tengo la oportunidad de seguir dedicándole tiempo a la creatividad".