JERUSALÉN.- El gobierno de Israel permitirá desarrollar su carrera artística en dicho país a la cuidadora filipina Rose Fostanes, quien resultó ganadora de la última edición de la versión local del popular programa de televisión "The X Factor", gracias a un permiso especial del Ministerio del Interior.
Fostanes, quien vive en Israel desde hace seis años con una visa que sólo le permitía trabajar en el sector de la asistencia a discapacitados y ancianos, recibió dos alternativas del ministerio para poder también dedicarse a la música, según informa la edición digital del diario Yediot Aharonot.
Una de ellas es la de combinar su nueva actividad profesional con la de cuidadora, y la otra es la dedicarse exclusivamente al canto, siempre y cuando la anciana a la que cuida esté dispuesta a romper el contrato por el que la trajo desde Filipinas.
La solución fue impulsada por el ministro israelí del Interior, Guideón Saar, a raíz de una ola de comentarios a favor de Fostanes en las redes sociales y medios tradicionales de comunicación.
La polémica alrededor de la ya conocida como la "Susan Boyle israelí" se originó la semana pasada, tras bajar del escenario como vencedora del concurso musical presentado por la modelo Bar Rafaeli.
Rose Fostanes, de 47 años, tuvo que hacer frente a la realidad que su condición de trabajadora extranjera le imponía a través de su permiso de trabajo, restringido a la posibilidad de ser únicamente "cuidadora". Pero la popularidad que despertó con su voz y con su personalidad convenció a las autoridades locales de darle una oportunidad.
"No canta una sola palabra en hebreo, y aún así la nación entera la votó porque es simplemente una tremenda cantante, con una tremenda personalidad", dijo la cantante Shiri Maimón, jueza y mentor de Rose en el programa de TV.
