Quinceañeras

-Adaptarse. Crear. Conocerse. Viajar.

En ese orden enumera Masiel Asecas, bajista y cantante de Lilits, las palabras iniciales de esta conversación sobre Visceral, el nuevo disco de su grupo. Son las respuestas espontáneas y en infinitivo a una pregunta sobre qué cosas han pasado con su banda de rock en los años previos a la aparición del disco, que está en la calle desde fines del año recién pasado.

Y los cuatro verbos son un buen índice del último tiempo en la vida de este grupo, que en 2014 va cumplir quince años. Si es por viajar, Lilits tocaron por primera vez fuera de Chile en este período, en Argentina (2010) y en Europa (2011). Si se trata de crear, en Visceral (2013) están sus primeras canciones nuevas en cuatro años, luego de sus discos iniciales Lilits (2005) y Sueltas (2009). A propósito de adaptarse, en el mismo lapso el grupo hizo frente el alejamiento de la guitarrista Lorena Lagata en 2009 y al distanciamiento temporal de la baterista Javiera Zebra ahora en 2013. Y si es por conocerse, hace cuestión de meses, poco antes del estreno de Visceral llegó al trío la nueva baterista invitada Stephanie Taffy Dönicke, y algo parecido había pasado en el disco previo, cuando apenas días después de publicado Sueltas se unió a su vez, y también sobre la marcha, la actual guitarrista del grupo. Bernardita Segunda se escucha por primera vez en Visceral tocando guitarras en un disco de Lilits.

-Tocando y componiendo también -precisa-. En el disco anterior sólo hice unas voces.

-Básicamente este disco lo compusimos entre las dos -agrega Masiel-. De repente llegó el momento de hacerlo, ya estábamos conocidas.

Primero fue descontrol

La historia completa de Lilits es la de un grupo de mujeres iniciadas en 1999 en el sonido y los circuitos del punk rock, como se oye en Lilits, que avanzaron hacia terrenos más próximos a géneros como el grunge en Sueltas, y que ya venían tocando en vivo canciones del nuevo disco hace años, como "Descontrol", el primer single.

-De hecho "Descontrol" fue la primera que salió, hace muchos años. Era otra cosa, no tenía letra todavía, pero por fin era un tema nuevo. En Mist la tocamos por primera vez -se acuerda Bernardita, y deja en el aire otra muestra del paso del tiempo: Mist fue por algunos años el único bar de rock en el pachanguero barrio Suecia de la capital. Luego quedó reducido a escombros por la pujante industria inmobiliaria local y en su lugar se levanta un futuro edificio de oficinas.

-Tal vez para llegar a este resultado fue necesario tomar un poco más de tiempo -considera Masiel a propósito de las canciones de Visceral-. Había que darse un aire para agarrar otras cosas. Pasa también es que uno hace otras vidas, no es poco lo que hay que trabajar y el tiempo que le das a la música no tiende a ser todo lo que uno quiera. Y aparte de que tampoco queríamos hacer algo tan parecido al Sueltas.

El sonido más pesado de los bajos que toca Masiel en Visceral marca por ejemplo esa diferencia, y al mismo tiempo en las nuevas canciones no se escuchan las guitarras sincopadas al modo ska del disco anterior, donde aparte venía incluida una recreación rockera de "Niña engreída", uno de los éxitos radiales de la banda new wave chilena Viena en los años '80. "Sí, era mucho más pop", dice la cantante al respecto. "Coqueteamos con el pop".

-¿Y qué tal fue, natural?
Masiel: Yo creo que sí. De eso se trata la música, de no encasillarse con nada y de ir descubriendo, si no qué lata. Ir explorando, explorando. Si no pregúntale a Radiohead.
Bernardita: O a la Madonna.
Masiel: El día de mañana si llegamos a hacer otro disco capaz que sea distinto, más pop, o electrónico. Tenemos gustos musicales tan variados. Me gusta mucho el rock pero también me gustan cosas que quisiera plasmar en otra parte. Siempre en la línea del rock, porque ya estamos en ese línea. El Sueltas era un poquito más popero y creo que necesitábamos sacarnos esta acumulación de cuatro años.

No es odio

Los primeros EPs de la banda garagera neoyorquina Yeah Yeah Yeahs o el álbum Suck it and see (2011), de Arctic Monkeys: esos son algunos de los discos que Masiel Asecas recuerda haber tenido en mente en los días en que Lilits daban forma al nuevo disco.

-Ahora hay más producción en general. En el Sueltas querían plasmar el sonido que había, crudo, de la tocata -dice Bernardita, que se hizo cargo con Masiel de la producción del disco, con la asistencia de Rodrigo Yoyo Otero (guitarrista de grupos como Casino, Sintra y la banda de Nicole) en la grabación de las guitarras.

-Los dos primeros discos fueron así, muy crudos, bien parecidos en términos de que no hay tanto doblaje -agrega Masiel-. Entonces ya había que hacer algo distinto. Con la Berni nos entendemos mejor musicalmente y pudimos enriquecer más las canciones con los conocimientos que tiene cada una. Hay más armonías, voces, arreglos, cortes.

-¿Cómo quedan sonando las canciones anteriores?
-Es una mezcla igual, porque desde siempre las toqué distintas al disco -dice la guitarrista-. Como no las grabé, es otra mano. Y hay varias a las que hemos hecho cambios, como "Tu pobreza".

-Pero tampoco es que las saquemos de su sonido, queremos tocarlas como son. No vamos a renegar de lo que hemos hecho, a mí me gustan mucho las canciones de los primeros discos -precisa la bajista. "Pijamera", "1999", "Furia", "Calle" y "Dime" son títulos de ese disco inicial que siguen presentes en vivo.

-¿Por qué "Dime" ha pasado la prueba del tiempo, por ejemplo?
Masiel: ¿Sabes por qué? Porque es una muy buena canción para empezar a prender, porque no tiene tanta letra y es bien juguetona. Aunque para cantarla es media complicada y hay que ordenarla un poquito. Y a lo mejor cuando cantaba la Bárbara (Bárbara Faldacorta, la cantante original de Lilits) era un poquito más fácil, pero ahora yo soy la que canta.

-Más allá de las canciones, ¿hay algo de esa primera época que permanece?
Masiel: Cuando lo grabamos no teníamos muy claro el rollo sonoro, entonces nos ayudaron el Álvaro España (cantante de la banda punk Fiskales Ad Hok) y el Pirinola (Rodrigo Barrientos, el técnico de grabación del sello CFA). Entonces suena bien punk y bien crudo, lo tocábamos en la sala, lo grabábamos, listo, ya, no dimos muchas vueltas. Después hemos ido aprendiendo. Lilits es una banda que puede llevar mil años pero no empezamos cuando sabíamos tocar, sino cuando nadie sabía tocar nada. Es como una persona que nació y ha ido creciendo en cada disco.
Bernardita: Y ahora está en la edad del pavo.

-¿Sí, en la adolescencia? ¿Se está enamorando?
Masiel: No, ya se enamoró.
Bernardita: Ahora está en el odio.

-De todos modos Lilits ya ha estado en el odio antes, ¿no? "Dime a la cara que soy una perra una vez más": así parte "Dime".
Masiel: Eso no es odio, sino que las mujeres tenemos derecho a estar enojadas. Porque se supone que las mujeres no podemos estar muy enojadas. Entonces hay que golpear la mesa fuerte. Sin miedo a nada.

Las madres, las zorras, las monjas: hostilidad verbal

Al propósito de ese punto, Bernardita Segunda acude por un momento al zodiaco para señalar otro factor común al interior de Lilits. "Lo que se da también, y puede ser gracioso si es que tiene que ver, es que somos las dos Sagitario", dice.

-¿Y qué significa?
-Significa que las Sagitario somos de una falta de tacto ridícula -explica, entre las risas de Masiel-. Que te decimos las cosas como son, a la cara y no vamos a dar la vuelta para que suene bonito. Para qué. Qué pérdida de tiempo: las cosas son así.

-Es muy apropiado para Lilits eso, ¿no?
-Sipo. Y Gianni (Luna, el manager de la banda) también es Sagitario.
-Eso nos ha traído finalmente un montón de problemas -dice la bajista-. Pero como dijo Neil Young…

-… ¿"Es mejor quemarse que desvanecerse de a poco"?
-No: "Todo fue por la música". Ni siquiera por uno mismo: por la música.

-¿Eso dijo? Está lleno de frases para el bronce Neil Young.
-Es en un documental en el que él se daba cuenta de que había sido una mierda con muchas personas. Pero explicaba que era porque sólo le había importado la música. Lo vi hace como tres o cuatro años y se me quedó pegado.

Las canciones del disco nuevo también fueron permeables a la actualidad mundial y local de los últimos años, agrega Masiel. "Tal vez se conecta con lo que ha pasado con los estudiantes, con las guerras en Siria o Palestina, los mapuche, leyes nuevas para la represión y también la injusticia constante hacia nuestro género, que se puede ver reflejada en las composiciones en general. Seguimos en una sociedad machista, sexista, donde las mujeres todavía ganamos menos, somos molestadas en la calle si estamos solas, intimidadas, acosadas en el trabajo…".

-… si te quieres poner un shortcito o un vestido o algo, es para ellos finalmente… -agrega Bernardita.

-Y cuando hablas de temas más serios: "Ah, la mina densa" -continúa Masiel-. O si uno toma una decisión muy fuerte las mismas mujeres te hacen la cruz.

-¿No hay una solidaridad de género?
Masiel: No la veo mucho.
Bernardita: Es que Chile es muy machista en general: hombres y mujeres. A las mujeres también les acomoda que sea machista.
Masiel: Incluso en el ambiente donde está uno se ven ese tipo de cosas. Tocar rock tiene que ver con pararse y decir las cosas con actitud y con fuerza. Y hacerlo bien. Este disco es bueno y tengo todo el derecho de decirlo, pero dentro del mismo género también lo he sentido: (las críticas) "Es que son muy rockeras", "es que son muy ruidosas". Y creo que es una mezcla de cosas que han pasado en este país durante tanto tiempo, de represión, de injusticia, que finalmente es imposible que la gente no se manifieste de alguna manera si has vivido toda tu vida bajo ese sistema. Uno trata de cambiarlo, aunque como dijo Roxana, con una cucharita uno no va a sacar una montaña.

-¿Roxana Miranda?
Masiel: Sí, cuando contó esa historia en uno de los debates presidenciales.
Bernardita: No, y en el fútbol, por ejemplo: ¿cuál es el peor insulto que le puedes decir a otro equipo?

-¿…?
Bernardita: "Madre".
Masiel: Las "madres", las "zorras", las "monjas". Todo lo femenino es peyorativo.

-Y "paternidad" es la supremacía de un equipo sobre otro.
Bernardita: Las madres, qué importante, y la manera de insultar a un hombre es dándole una connotación femenina.
Masiel: Una vez nos dijeron que el Sueltas sonaba como de niñitas. ¿Y si quiero sonar como niñita? Qué tiene de malo. Eso me tiene un poco harta igual. Una mina puede ser mucho más venenosa que un hombre. Yo no he conocido hombres malos, pero sí a minas venenosas.
Bernardita: "Tocai como hombre", me han dicho a mí.
Masiel: Claro, y ése es un halago.

-¿Como si fuera bueno no tocar como mujer?
Bernardita: Claro, un halago. "Tocai como hombre". El último que me lo dijo dijo "Puta, es una mierda lo que voy a decir pero no sé decirlo de otra manera: tocai como hombre".

Con todo lo que pasa en vivo

"Ahí estoy, tirada, puertas adentro, pestillo puesto", son las últimas palabras de "Puertas adentro", una canción con letra sobre la violencia doméstica que Lilits grabó en su disco previo, a propósito de contingencias. En Visceral en cambio esa contingencia está expresada por otras vías, dice Masiel.

-Decidimos plasmar todo el descontento o la pena por lo que pasa en el mundo, o en nuestro entorno, a través de la misma música. Este disco tiene mucho más pasajes musicales que cantados.

-Tal vez "Descontrol" sí tiene una letra más concreta. ¿Eso tiene que ver con que es una canción del 2011, que fue el año de mayor movimiento social en Chile?
Masiel: Pero en ese tiempo no tenía letra. La letra es de ahora. Aunque sí tiene que ver con lo que pasó en Egipto, con los indignados en España, en Wall Street, en Chile.

Tres generaciones de integrantes están unidas en la actual formación de Lilits: la recién incorporada Taffy en la batería, que debutó a fines de 2013 en el bar ñuñoíno La Batuta, en el lanzamiento del disco en la discoteca Blondie y luego en el show de Lilits con Manu Chao; la guitarrista Bernardita Segunda, desde 2009, y Masiel Asecas, única fundadora presente desde 1999 hasta la fecha en el grupo.

-Me gustaría eventualmente tener otra guitarrista, pero tengo la convicción de que, por todo lo que pasa en vivo, con la energía que uno está entregando, eso da un poco lo mismo -dice Bernardita.

-Recién Masiel contaba que era exigente cantar y tocar el bajo en una canción como "Dime". ¿No has considerado sólo cantar y que hubiera otra bajista en Lilits?
Masiel: No, qué lata. La cantada es como el descarte, me siento mucho mejor con el bajo.

-¿Te sientes más protegida tal vez?
Masiel: No sé.
Bernardita: Sí, es un escudo. Alguna vez tuve que cantar solamente, y hace rato que no me pongo nerviosa, pero me puse muy nerviosa ese día. Era la oportunidad para moverse, pero no sabía qué hacer.
Masiel: Con una guitarra puedes mirar para abajo.
Bernardita: Y a la Masiel que le gusta poco taparse la cara.

-De hecho antes era Masiel Chasquilla.
Masiel: Sí, pero ya no. Ahora es Masiel Asecas.

-Justo cuando apareció Sueltas se fue Lore Gata, la guitarrista anterior, y ahora cuando apareció Visceral se alejó Javiera Zebra. ¿Es una coincidencia o un patrón?
Masiel: La idea es que no pase. De hecho seguimos mandando fotos con Javiera. Stephanie está tocando con nosotras pero no es parte de Lilits aún.
Bernardita: Porque tampoco sabemos si querría. Es súper sesionista, está tocando en varios grupos.
Masiel: Le dio un soporte a la banda que no tenía. Si Javiera quiere y puede volver las puertas están abiertas. Nosotras ya estamos metidas en una constante evolución musical, hay que ir para adelante y si uno saca un disco tiene un compromiso importante, de mantener una misma dinámica. Todos hemos perdido. Yo he perdido pololos, muchas amistades por la música, pero…

-¿… como Neil Young?
Masiel: Eso. Si fuera para atrás te juro que no me arrepiento de nada, porque de cada uno he aprendido, y he dejado gente en el camino, que me da pena, pero a la vez he conocido gente maravillosa con la que he congeniado muy bien.

-Eres la única Lilit que viene desde el comienzo. ¿Qué significa eso para ti?
-Desde que formamos la banda con las chiquillas que partimos fue algo seriol, y si es de verdad no puedes dejar algo a medias. Puede que éste sea el último disco de Lilits, puede que no, pero hay que hacerlo bien.
-Si Lilits es un tren -compara Bernardita- la Masiel es el motor.