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Santiago: Viernes 16 de agosto del 2024 | Actualizado 20:41
VIÑA DEL MAR.- El humorista Ruddy Rey tenía altas expectativas de lo que sería su debut en el Festival. Sin embargo, una rutina nada de graciosa y el haber salido a escena tras Ana Gabriel le pasaron la cuenta y terminó inscribiendo su nombre en la historia de fracasos del certamen, como el primer artista de Viña 2014 en ser devorado por el "monstruo".
La cosa partió mal. El comediante oriundo de la Quinta Región entró en medio de pifias y nunca logró remontar. En vez de los chistes, su show consistió en una especie de ranking musical conformado por temas a los que les cambió la letra para causar gracia, algo que fue completamente inútil.
"Quiero regalarle algo a los chilenos que vinieron a apoyarme como artista nacional", dijo en un manoseado intento por ganarse a los asistentes que, a esas alturas, ocupaban con fuerza cada pausa entre canción y canción para hacer sentir su desagrado.
Ruddy Rey acusó recibo y se sinceró sobre el escenario. "Es doloroso. Ustedes no se imaginan lo que me costó llegar hasta acá. Mi show siempre ha sido corto, pero me he preparado con cariño y amor para ustedes", declaró, logrando así tibios aplausos de apoyo, sólo por su condición de comediante local en riesgo.
Se esforzó, es innegable, pero su rutina no fue acertada y los asistentes, aún molestos por el fin del show de Ana Gabriel, no se lo perdonaron.
Cuando ya llevaba cerca de diez minutos de presentación su nerviosismo era evidente. En otro intento por ganarse al menos a la galería, llamó a legalizar la marihuana y pidió educación gratuita, pero el "Monstruo" ya no quería nada con él.
Luego de casi 30 minutos eternos (que promediaron 39,1 puntos de rating) se despidió diciendo que había llegado a Viña 2014 con el objetivo de "reivindicar el humor musical, el humor blanco para toda la familia".
"Espero tener otra oportunidad para poder llevarme los premios que tanto anhelé", dijo tras bajar del escenario, para luego desahogarse en su cuenta de Twitter. "Bueno... lo di todo, habrá tiempos mejores", escribió desde su camarín.
