Ruddy Rey aseguró que su fallido paso por el Festival no es un fracaso.
El MercurioVIÑA DEL MAR.- "Estuvimos media hora sobre el escenario con pifias de principio a fin y no tuve ni siquiera cinco minutos para mostrar un poco más de mi trabajo, pero no lo veo como un fracaso, sino como una oportunidad de crecer de manera enorme", afirmó Ruddy Rey tras su difícil paso por Viña 2014.
El comediante no convenció con su rutina musical y recibió el masivo rechazo del público del Festival, convirtiéndose así en la primera víctima del "Monstruo" en lo que va del certamen.
"Traté de hacer personajes latinos que son conocidos por todo el mundo. A lo mejor no eran del gusto del público de Ana Gabriel y Raphael, pero lo hicimos con mucho cariño y humildad", indicó el artista, añadiendo que "por un lado me voy contento, aunque me hubiese gustado otro recibimiento".
Ruddy Rey contó que había probado esta actuación en otros escenarios y había tenido buenos resultados. De ahí que arribara al certamen confiado en que podía conectarse con los asistentes. Sin embargo, reconoció que "en ningún minuto pude tener una onda con el público y por eso nos fuimos 'de una' con la rutina. Pasó lo que pasó, pero hice casi completo el show que tenía preparado y eso me deja tranquilo".
Con honestidad afirmó que "me voy con la amargura de no haberme llevado ningún premio y de que, a lo mejor, me podrían haber dado un poco más de tiempo o sacarme nuevamente a escena para mostrar algo más, pero eso no pasó, como sí ha ocurrido otras veces".
El oriundo de la Quinta Región criticó que lo hayan presentado como humorista, pues "al decir eso te encasillan y esperan que cuentes chistes". De acuerdo a sus palabras, él es un showman y su trabajo siempre ha estado marcado por lo musical, razón por la que armó un espectáculo en el que esperaba que la gente identificara su sello. "Que pena que eso no resultó. Voy a tener que dedicarme a contar chistes o hacer stand up", señaló con un toque de ironía.
Ruddy Rey se sintió poco apoyado por la dupla de animadores y así lo dejó entrever luego que le consultaran si Rafael Araneda y Carolina de Moras podían haber hecho algo para ayudarlo a salvar la situación. "Pueden ver la presentación en internet y compararla con la de los otros cómicos. Hagan esa conclusión ustedes", dijo muy serio.
Pese a la frustración natural de la derrota, afirmó que su carrera no termina acá. "Voy a seguir trabajando con más ganas", indicó enfático y advirtió que "no voy a hacer un docurreality de esto, eso sí", en clara alusión al realizado por Ricardo Meruane tras su fracaso en el Festival de 2011.
Antes de cerrar una noche para el olvido, el comediante aclaró que "si de nuevo me ofrecen venir a Viña lo voy a aceptar porque no tengo miedo. Yo nací para esto y por eso estoy aquí", recalcando que "mi propuesta es distinta y voy a insistir con ella".