''Me crié en un entorno donde no se bailaba, así que bailar para mi es hoy un privilegio adquirido'', explica Drexler sobre esta nueva arista de su faceta como cantautor.
Archivo El Mercurio.CIUDAD DE MEXICO.- Jorge Drexler no quería componer su nuevo disco, Bailar en la cueva con una perspectiva analítica. Quería disfrutar de canciones que rindieran un tributo a las raíces musicales latinoamericanas y que fueran bailables. Así de simple.
Tras la experiencia que vivió en 2012 con el "Proyecto N" -la aplicación que desarrolló para intervenir y transformar una canción en tiempo real-, el músico uruguayo abordó el lado opuesto y compuso canciones que fueran bailables casi en su totalidad.
"Los textos están igual de trabajados que en otros discos, pero la diferencia es que esta vez prioricé que mandaran los pies sobre la cabeza. 'Proyecto N' se escribió para intentar emocionar desde la idea y Bailar en la cueva quiere conseguir que el escucha se mueva", dice el cantautor al teléfono desde Madrid.
Para el compositor e intérprete el baile era una actividad casi desconocida: hace una década compuso "Don de fluir", una canción incluida en su disco Eco, donde se confiesa incapaz de pisar una pista de baile.
Criado en su natal Uruguay en la década de 1970, bajo la dictadura militar del entonces presidente Juan María Bordaberry, Drexler recordó que la represión en su país llegaba hasta el cuerpo.
"Bailar no estaba bien visto en esa época, eran tiempos de reflexión, de lucha, de congoja, de miedo. Estaba mal visto por la dictadura, estaba mal visto por el entorno de intelectuales de izquierda donde yo me crié. Me crié en un entorno donde no se bailaba, así que bailar para mi es hoy un privilegio adquirido", señaló. "Esa persona que miraba desde afuera con aires de intelectual, como dice la canción, hoy ha dado dos pasos al interior de la pista de baile, y quiero disfrutar de eso", agregó.
El varias veces nominado al Grammy Latino dijo que, además de su introducción al baile, Bailar en la cueva representa un diario de viaje de su paso por Iberoamérica en los últimos cuatro años.
"Me di permiso a sentirme en casa en Latinoamérica. Aunque en el disco destaca la música colombiana, en realidad es una apertura al continente entero porque yo también soy eso, yo también puedo tener referencias de la cumbia peruana de la década de 1970, yo también puedo abordar una canción con ideas de la música ranchera como lo hice en la canción 'Todo cae"', apuntó.
Bailar en la cueva, que saldrá a la venta en Latinoamérica y Europa el 25 de marzo, es el motor que impulsará la gira que Drexler comenzará en abril en España y que llegaría en septiembre a México y otros países de la región.
"Será un show muy diferente de los anteriores. Queremos que la gente pueda moverse, yo personalmente miro con mucha alegría esta gira, acompañado de una banda muy poderosa", concluyó Drexler.