Ai Weiwei protagoniza el corto ''Tormenta de Arena'', del estadounidense Jason Wishnow.
AFP
BEIJING.- El artista y disidente chino Ai Weiwei ya cultivó géneros como la pintura, la escultura o la música, pero su primera incursión como actor en una película acaba de ser presentada y será en un cortometraje de ciencia ficción titulado "Tormenta de Arena".
El corto, dirigido y escrito por el estadounidense Jason Wishnow, quien espera estrenarlo el próximo verano, fue financiado con aportes voluntarios de internautas a través de la web de "crowdfunding" Kickstarter, en la que se presenta como "un film secreto rodado en China".
"Cuando el aire es tóxico y el actor protagonista está bajo vigilancia (policial), la película debe ser corta, y el rodaje rápido", señala Wishnow sobre "Tormenta de Arena", filme en el que Ai interpreta a un contrabandista de agua en una China de un futuro cercano, donde este bien es muy escaso.
Según señaló el propio artista chino en el vídeo promocional, la película "no es en realidad una historia sobre el agua, sino sobre la información", en la que el líquido elemento es metáfora y donde el Beijing del "smog" es un perfecto escenario para un futuro distópico.
La película fue rodada en enero de 2013, coincidiendo con una de las peores crisis de contaminación atmosférica de la capital china, y en sólo una semana del lanzamiento de la campaña de financiamiento en Kickstarter ha recaudado más de 60.000 dólares, con los que Wishnow costeará la postproducción y distribución.
En la cinematografía del corto colaboró el australiano Christopher Doyle, aclamado en joyas recientes del cine chino como "Héroe", de Zhang Yimou, o "Deseando Amar", de Wang Kar-wai.
Ai Weiwei, famoso diseñador del Estadio Olímpico de Beijing y activo en decenas de causas sociales y de derechos humanos en China, tiene limitados sus movimientos desde que en 2011 fuera condenado a una millonaria multa por fraude fiscal, que según sus seguidores fue una venganza del régimen contra su activismo.
La semana pasada se inauguró en Berlín la que hasta ahora es la mayor retrospectiva de Ai, a la que el artista-disidente no pudo acudir, ya que en el proceso por fraude le fue retirado el pasaporte, y éste aún no le ha sido devuelto.