Hugh Jackman en el rol de Wolverine.
La SegundaLONDRES.- Hugh Jackman envidia el viaje al pasado de Wolverine en "X-Men: Días del futuro pasado", la última entrega de esta exitosa saga en la que su personaje retorna a los años setenta para impedir una catástrofe.
"En la película una mutante me manda al pasado. Me encantaría poder hacerlo y volver a mis 18 pero con todo lo que sé ahora", dijo en Londres el actor australiano de 45 años, que derrocha energía y magnetismo durante la promoción de la nueva película de X-Men.
"Días del futuro pasado" de Bryan Singer, quien ya dirigió las dos primeras películas de la trilogía original, se ha estrenado ya en Reino Unido y EEUU.
La versatilidad que le permite brillar tanto en musicales de Broadway como en la piel de "Wolverine" hace que a Jackman, un actor que todavía no sido galardonado con el Oscar, le lluevan las ofertas y se vea obligado incluso a rechazar papeles, comentó.
El de Wolverine es un papel que representa por séptima vez, después de tres entregas originales junto a los veteranos Ian McKellen (Magneto), Patrick Stewart (profesor Charles Xavier) o Halle Berry (Tormenta), dos monográficos sobre su personaje y un cameo en "X-Men: First Class".
Esa "precuela" de 2011, dirigida por Matthew Vaughn, se ambientó en el pasado y mostraba a unos personajes jóvenes representados por otros actores, como Michael Fassbender en la piel de Magneto y James McAvoy en el papel de un profesor Xavier que todavía no iba en silla de ruedas.
El director estadounidense, que se ha apartado de la promoción de la película porque se enfrenta a una acusación por presuntos abusos sexuales a un menor en 1999, retomó las riendas de X-Men que había abandonado para dirigir Superman y rescató lo mejor de ambas sagas para unir en pantalla a los veteranos con los jóvenes.
"Hay muchas sorpresas, pero verlos juntos creo que es una de las cosas más divertidas para la audiencia", señaló Jackman, quien se siente "muy cercano" a McKellen, Stewart y Halle Berry pero también ha disfrutado de trabajar con los nuevos actores.
"Fassbender, McAvoy y Jennifer Lawrence (Mística) son unos actores increíbles así que ha sido apasionante e inspirador trabajar con ellos", afirmó el australiano, "incapaz" de elegir entre unos u otros y que no pudo garantizar quiénes protagonizarán la próxima película de X-Men, "Apocalypse", que se estrenará en 2016.
A pesar de la rigurosa dieta y plan de entrenamiento que debe seguir para estar en la impresionante forma de Wolverine, Jackman asegura que cada vez le resulta "más fácil" interpretar al personaje y que, aunque ya hay planeada una segunda parte de "The Wolverine" para 2017, en algún momento tendrá que "colgar las garras y cedérselas a otro".
Una cinta "grande y peligrosa"
"X-Men: Días del futuro pasado" es una película "grande y peligrosa" a la par que "sorprendente y sofisticada", a juicio del escocés James McAvoy, de 35 años, quien tuvo que verse frente a frente con su personaje envejecido, el profesor Xavier al que da vida Patrick Stewart.
"Stewart es brillante, es uno de mis actores favoritos, le llevo viendo desde que era un niño en Star Trek. Cuando me dijeron que iba a hacer su papel en la última película me quedé sorprendido porque somos diferentes y entendemos el personaje de forma distinta, pero nunca imaginé que íbamos a actuar cara a cara", afirmó.
"Cuando empezamos a rodar fue muy intenso y yo estaba nervioso y eso, pero entonces oyes ¡Acción! y se te olvida todo lo demás y haces tu trabajo lo mejor que puedes", añadió McAvoy, que intentó mantener las diferencias entre el personaje joven y el mayor.
Por su parte, el irlandés Michael Fassbender, en la piel de Magneto de joven y quien no coincide en pantalla con McKellen, formará una pareja explosiva con Mística, la mutante azul representada por Lawrence con la que pondrá la chispa amorosa al largometraje.