SANTIAGO.- "Siempre pensé que en las cosas que leía de Juan Rulfo había mucho potencial escénico y cinematográfico. Su mundo me parecía muy atractivo", cuenta el director teatral Cristián Plana, respecto de su relación con la obra del célebre escritor mexicano, de quien es confeso admirador.
En ese marco leyó y releyó durante años el volumen de cuentos "El llano en llamas", del que le resonó un relato en especial: "Paso del norte". Tanto, que mucho antes de estrenar algunas de sus últimas obras había decidido que algún día lo llevaría a las tablas. Y ese día llegó.
Mañana sábado en el Teatro La Memoria, de calle Bellavista, se estrena la versión de Plana para el cuento en que Rulfo expone la despedida entre un padre y su hijo, antes de que éste partiera a atravesar la frontera hacia Estados Unidos, en el México de mediados del siglo pasado.
"Ahora era el momento para hacer una obra así, con dos personajes, y tenía la motivación de meterme en algo como un cuento, y no en una obra. Quería algo que me diera un poco más de libertad para poder crear, un material breve al que yo pudiera sumarle cosas", cuenta el director que antes consechara aplausos con montajes como "Comida Alemana", "Partido" y "La Señorita Julia", entre otros.
En todos ellos, Plana distingue un hilo conductor: "Hay temas que atraviesan mi obra, como el silencio, la muerte, la soledad, lo atmosférico", que vuelven a hacerse presentes en "Paso del Norte", ahora abordados desde una zona demarcada por la frontera y los límites, lugares en que se sitúa el relato.
"Esta obra tiene que ver con eso, más que con la migración. El peligro de atravesar la frontera, el límite", explica el director, mencionando elementos que también resuenan hoy en nuestro propio país. "Aquí también hay una violencia latente respecto del que viene de afuera, del que es distinto. Siendo concretos, con el peruano, por ejemplo".
Y aunque "Paso del Norte" habla "del peligro de cambiar de realidad" y de las expectativas en torno a un territorio imaginado, Plana destaca como eje central a la relación entre padre e hijo, anclada en este caso en la despedida, cuando el joven avisa a su progenitor que parte en busca de oportunidades y de sustento para su familia, cuyo cuidado le encarga.
La obra, hablada en el lenguaje mexicano original y complementada por cardenches (un tipo de canción tradicional de ese país), abre este sábado 21 sus presentaciones al público, en la sala ubicada en Bellavista 0503. Las funciones tendrán lugar hasta el 23 de agosto, de miércoles a sábado a las 21:00 horas, con entradas que van de $3.000 (estudiantes) a $6.000 (general).